Mis croquetas favoritas

Newsletter del viernes, 17 de enero de 2025

Cristina Alvarez, directora de Cocina Fácil
Cristina Alvarez

Directora de Cocina Fácil y periodista especializada en gastronomía

Croquetas de calçot
Istock

Ayer fue el día internacional de la croqueta. Yo, es que es pensar en croquetas y visualizo a mi madre y a mi tía en la cocina, liadas con la bechamel y el pan rallado, con las manos en la masa (nunca mejor dicho). Mi tía cocina la masa y mi madre les da forma. No veas qué arte tiene la mujer, parece que las croquetas bailan entre sus manos, y le quedan todas igualitas.

Hacen croquetas de todo: de cocido (bueno, de la carn d'olla de la escudella), de pollo, de beicon, de langostinos y mariscode jamón y queso, de bacalao, de quesos, de verduras... Hasta de morcilla, las han hecho. Pero, de todas sus croquetas, mis preferidas son las de calçots. Buah, no sabes lo que es eso. Podrías pensar que solo con bechamel y calçots quedan un poco sosas, pero ni hablar. Son melosas, sabrosas, se deshacen en la boca... son únicas.

Hace un tiempo, salió Carme Ruscalleda en la tele hablando de cómo cocinar calçots y mi madre y mi tía llamaron al programa. Tuvieron la suerte de que les conectaran en directo y le dijeron a la chef que ellas hacían croquetas con los calçots. "¡Pues me parece una gran idea!", les dijo Carme Ruscalleda. "Y se podrían servir con un poquito de romescu", añadió. 

Lo que no le contaron a Carme Ruscalleda son todos los secretos de su receta. A ella no, pero a mí sí 😉​. Y yo no me puedo callar, así que te los cuento a ti.

Curiosidades sobre las croquetas que (quizás) no conocías

  • Aunque son patrimonio culinario español, las croquetas nacieron en Francia. De hecho, su nombre proviene del verbo croquer, que significa crujir.
  • La primera receta de croquetas apareció en el libro Le cuisinier roial et bourgeois (1691) de François Massialot. Bueno, las primeras recetas, porque salían como 15, y ninguna llevaba bechamel. Eran bolitas rebozadas de carne, huevo, trufas y aromáticas.
  • Las primeras croquetas con bechamel (o sea, parecidas a las nuestras) las cocinó el chef francés Marie Antoine Carême. Las llamó croquettes à la royale y eran simplemente eso, bechamel con una capa crujiente.
  • En España, la primera receta de croquetas no fue salada, sino dulce. Apareció en 1830 en el libro Manual de la criada económica y de las madres de familias que desean enseñar a sus hijas lo necesario para el gobierno de su casa (tela...) y eran de arroz con leche. 
  • En 1812 se ofreció una comida a los soldados ingleses que vinieron para luchar contra Napoleón y, cómo no, les sirvieron croquetas.
  • En 1936, Patxi Bollos batió el récord de comer croquetas. Nada más y nada menos que 236 croquetas se metió entre pecho y espalda, mientras llevaba la comida a la sociedad gastronómica Istingorra de la que formaba parte. Y luego, cenó. Vasco tenía que ser.

Muchas gracias por estar al otro lado de la pantalla.

El viernes que viene, más.

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