Tzatziki vegano con yogur de pipas remojadas y pepino, un entrante supersaludable

Hoy hemos preparado un entrante vegano, tipo tzatziki, con pepino y pipas, de lo más saludable.

victor fernandez cocina facil
Víctor Fernández

Redactor y cocinero

TZATZIKI CON YOGUR DE PIPAS DE GIRASOL

Disfruta de un tzatziki vegano de pipas de girasol.

Cocina Fácil / RBA / ANA GARCÍA
8 personas
20 min

5

(4 votos)

Dieta:

vegana

Vegetariana

Temporada:

Todo el año

Técnica:

Sin cocción

Tipo Plato:

Aperitivos y tapas

Acompañamientos

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

Preparación con antelación

Si buscas una receta rápida y saludable y fresquita, ideal para servir y disfrutar si tienes invitados veganos, esta crema hecha con "yogur" de pipas de girasol y pepino va a ser un éxito. La receta tradicional de tzatzikise hace con el típico yogur griego, aquí lo hemos preparado con pipas remojadas. 

Un aperitivo con ingredientes naturales, llenos de sabor y probióticos naturales, como el rejuvelac de quinoa, una bebida fermentada. Además, es perfecto para preparar con antelación y sorprender a tus invitados con un toque original y delicioso.

Te adelanto que puedes llevar a tu mesa esta deliciosa crema en cualquier época del año. Por supuesto es ideal como plato ligero para los días de calor, pero también puede ser un primer plato o entrante para abrir boca de una comida más contundente de un día de frío. En fin, es tan ligera y sabrosa que puedes ponerla sobre la mesa prácticamente cuando quieras.

Esta crema de yogur de pipas y pepino se presta a un montón de variantes y presentaciones. Imaginación al poder. Puedes servirla en vasitos pequeños, individuales, para un aperitivo elegante o como aderezo en wraps o tacos veganos, dándole un giro saludable a platos tradicionales o por qué no, para dipear. Perfecto para sorprender a todos tus invitados con un plato distinto y que nadie se espera.

Ingredientes paraTzatziki vegano con yogur de pipas remojadas y pepino, un entrante supersaludable

  • 250 gramos de Pipas De Girasol (remojadas 6 horas en agua)
  • 400 mililitros de Rejuvelac de quinoa
  • 2 Pepinos
  • 1 puñado de Menta fresca picada
  • 1 cucharadita de Eneldo seco
  • 1/2 cucharadita de Sal Marina

1. Prepara las pipas y la quinoa

Una vez remojadas, enjuaga bien las pipas de girasol y tritúralas junto con el rejuvelac de quinoa hasta que consigas una textura cremosa y homogénea.

2. Deja fermentar

Deja reposar la mezcla en un frasco de vidrio cubierto con un trapo. Fermenta a temperatura ambiente durante unas 6 horas; esto añadirá un toque extra de sabor y suavidad al yogur.

3. Enfría en la nevera

Después de la fermentación, enfría el yogur en la nevera para que esté bien fresco y listo para mezclar con el resto de ingredientes.

4. Ralla el pepino

Pela y ralla los pepinos lo más fino posible, y, para evitar que la crema quede muy líquida, escúrrelos bien.

5. Une todos los ingredientes

Mezcla el yogur de pipas con el pepino rallado, la menta picada, el eneldo y la sal marina. Remueve bien para integrar todos los ingredientes, ajusta la sal a tu gusto y ¡listo para servir!

El truco

Este tzatziki lo puedes comer con crudités de verduras en palitos o crackers deshidratados.

Si quieres darle un toque más aromático, añade un poco de albahaca o cilantro fresco. Si buscas algo más suave, te recomiendo que añadas tan solo una pizquita de eneldo y si, por el contrario, lo que buscas es un toque intenso te recomiendo añadir unas gotas de tabasco, os garantizo que el toque picante le va de maravilla.

Una de las cosas que me gusta reseñar de esta receta es que es perfecta para preparar con antelación. Puedes tener la crema lista un día antes de la ocasión, incluso dos días, y guardarla en la nevera a poder en la zona más fría; los sabores, al reposarse la crema, se potencian. Eso sí, acuérdate de remover la crema de pepino antes de servirla para que adquiera la textura y apariencia correcta. Tampoco estaría de más mantener a temperatura ambiente un par de minutos antes de llevar a la mesa, tiene que estar fría pero no helada.

Esta crema es un aperitivo lleno de frescura y sabor, ideal para quienes buscan recetas veganas y saludables, te animo a probarla en casa, te va a encantar, de eso no hay duda. Es una receta sencilla, saludable y sorprendente. Además, su preparación no te llevará mucho tiempo, no necesitas dominar técnicas complicadas y los ingredientes son accesibles y fáciles de encontrar. Perfecta para un aperitivo diferente o un acompañamiento refrescante. Ya sea en un pícnic, una cena informal o como parte de un menú vegano, esta crema aporta ese toque especial que tanto gusta.

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