Aunque solemos mantenernos fieles a la receta tradicional de las natillas de la abuela , es verdad que se han ido introduciendo pequeñas variaciones para actualizar este postre (a cada cual mejor). Así, puedes encontrar las natillas en blanco y negro , o las natillas de chocolate con crujiente de guirlache , las natillas con gelatina de moscatel , las natillas de plátano y cúrcuma o las natillas de aceite de oliva con salsa de arándanos. También las encontrarás combinadas con otros postres como el flan de chocolate, leche condensada y natillas , la tarta de galletas y natillas , las tartaletas de manzana con natillas o la fondue de frutas con natillas . Opciones para todos los gustos. Poco puedo decir sobre las natillas que no se haya dicho ya. Este postre de toda la vida es, por sí solo, una de las maneras más entrañables de conectar con nuestra infancia. Recuerdo perfectamente la alegría contagiosa cuando en el colegio había natillas de postre . ¡Fiesta total! También recuerdo que a mi abuela le encantaba añadir la tradicional galleta, costumbre que también había en muchas familias y pasará a la posteridad. Las galletas Lotus son las otras protagonistas de este postre. También conocidas como speculoos , son un tipo de galletas de mantequilla muy típicas de Bélgica, Holanda y algunas regiones de Alemania, cuya principal característica es que llevan muchas especias como canela, nuez moscada, clavo, jengibre en polvo, cardamomo y pimienta blanca. Resultan bastante densas porque su masa solo lleva una pizca de levadura y crecen poco durante el horneado. En esta receta no solo necesitarás galletas Lotus para decorar, sino también crema Lotus, que encontrarás fácilmente en el supermercado en el lineal de las cremas de cacao y cacahuete. Con ellas también podrás hacer tarta de galletas Lotus y mascarpone (sin horno), sándwiches de helado de Lotus , o cheesecake de galletas Lotus , también en vasitos, sin horno e ideal para fiestas especiales. Más ideas dulces en vasitos Si te hubieran sobrado algunas galletas Lotus, podrías aprovecharlas para preparar estos vasitos con crema de mascarpone y crema de chocolate . Para ahorrar tiempo podrías sustituir la primera de ellas por yogur griego. La fruta funciona muy bien en los postres con vasitos. Prueba de ellos es esta mousse con galletas y fresas que tendrás lista en 3 pasos: cubre la base con galletas desmenuzadas, rellena con la mousse de chocolate y decora con fresa laminada y virutas. Aquí te traigo otra mousse, en este caso mousse de melocotón y melón que, pese a lo que parezca en un principio, se hace enseguida. Tritura el melón con los melocotones, un poco de zumo de limón, azúcar y yema de huevo. Mezcla con las claras montadas y la nata, y sirve bien fría. Por su parte, los vasitos de sandía y yogur son un postre que no resulta nada pesado, con lo que puedes disfrutar de ellos un día normal y corriente. Llevan nata montada pero puedes sustituirla por yogur griego sin azúcar. ¿Quieres un postre sin horno? Los chupitos de quesada son un clásico reinventado para el que invertirás menos de 10 minutos de tu tiempo. Lo que hace que este postre sea tan especial es su delicioso caramelizado de naranja y menta. Otra tentación en forma de postre: vasitos de manzana al horno con crema inglesa . Sus especias conquistarán incluso a los paladares más exigentes. Prepara tu postre elegante, fácil y barato con dados de manzana, crema inglesa y crocanti de almendra.