Si preguntáramos qué carne es la más usada en nuestras cocinas, seguro que el pollo estaría en el pódium . Y es que es uno de nuestros mejores aliados. De carne blanca, suave y saludable, de él se aprovecha todo, desde la carcasa, para hacer deliciosos caldos caseros , hasta las alitas , los muslos, los higaditos y, la parte más utilizada por todos, las pechugas . Ideal para toda la familia , desde los más pequeños a los mayores, el pollo se puede cocinar de muchísimas maneras: a la plancha, guisado, al horno, al vapor… Además, por si fuera poco, tiene un precio muy económico. Hoy te descubro una receta que te va a encantar y que, con total seguridad, vas a realizar en más de una ocasión: un guiso de pollo con salsa de aceitunas . Me la enseñó una vecina (ella la aprendió de su abuela), y parece ser que es un plato muy típico de Andalucía, concretamente de Cádiz, Sevilla y Málaga. Muy sencillo de hacer y resultón, la combinación entre la carne de pollo y las aceitunas es toda una sorpresa gustativa. Sírvelo tanto en los menús de diario como en una comida con invitados y siempre triunfarás. Pasos esenciales de la receta La realización de esta receta no tiene complicación alguna. Antes de empezar el guiso, para que la carne quede tierna y suave, es importante dorarla en una cazuela. De esta manera quedará sellada y los jugos se mantendrán en su interior. Luego, en el mismo aceite, con toda la sustancia del pollo, empieza a realizar un sofrito de cebolla . Déjala rehogar lentamente hasta que quede bien caramelizada. Así aportará un gran sabor al guiso. En este punto, ya podrás volver a incorporar los trocitos de pollo, el vino y, unos minutos más tarde, el caldo. Puedes utilizar un caldo de pollo , pero, si quieres que quede más suave, puedes decantarte por uno de verduras. A partir de aquí, la receta no tiene ningún secreto. Deja que el pollo vaya haciendo chup chup, a fuego lento, y, cuando falten 15 minutos para terminar la cocción, agrega las aceitunas y las alcaparras . Un apunte: este guiso está muy rico si se consume bien calentito, recién hecho, pero también lo puedes dejar la nevera durante 24 horas y servirlo, a temperatura ambiente, como si fuera un escabeche. Variantes para el pollo guisado con salsa de aceitunas En lugar de un pollo entero troceado, puedes usar solo los muslos o contramuslos . Esta misma receta se puede realizar con otras carnes. No dudes en utilizar pavo , pero también prueba con solomillo de cerdo . Quedará fabuloso. El vino blanco se puede sustituir por brandy o vino de Jerez . En el momento de incorporar las aceitunas, espolvorea un poco de perejil picado u otras hierbas aromáticas como el tomillo o el orégano . Una vez tengas sofrita la cebolla y antes de agregar el pollo, incorpora unas cucharadas de salsa de tomate . Al llevar a la mesa, acompaña este guiso con un arroz cocido o unas legumbres .