Pocas cosas tienen tanto poder de convocatoria en la mesa como unos buenos filetes empanados , pero si encima están bañados en besamel, el efecto es casi mágico. Esta receta de cinta de lomo empanada con besamel, es de esas que uno empieza a preparar “para los niños” y acaba comiéndose media bandeja antes de servirla. Os aseguro que quedan espectaculares. Y es que este plato lo tiene todo, es crujiente por fuera, jugoso por dentro, con un punto dulzón y ácido en la salsa que le da alegría y una guarnición fresca y colorida . ¿Se puede pedir más? Bueno, sí, que no dé demasiada guerra en la cocina. Y la buena noticia es que no la da. Con un par de trucos (que te cuento más abajo) y un poco de organización, tendrás una receta que funciona tanto para el tupper del día siguiente como para una cena familiar que parezca de restaurante . Tres ideas finales La besamel también se puede aromatizar con nuez moscada o un pelín de ajo en polvo para darle más carácter. Y si te sobra, úsala para croquetas. Para un acabado más ligero , en lugar de freír, puedes hornear los filetes a 200 ºC durante 15 minutos. No quedarán tan crujientes, pero sí más saludables. La salsa de naranja combina genial con otros ingredientes como un chorrito de brandy o un poco de mostaza antigua. Le da un giro más adulto si estás cocinando solo para mayores. Si me preguntas ¿Por qué merece la pena esta receta? Te diré la que la respuesta es fácil: Porque es de esas recetas que parecen más elaboradas de lo que son, y que se pueden dejar medio hechas con antelación. Y porque, sinceramente, ese contraste entre la besamel cremosa, el empanado crujiente y la salsa de naranja es una locura. Ideal para esos días fríos en los que apetece algo calentito y sabroso, además con un punto diferente. Y si hay niños en casa, no hace falta decirlo, les va a encantar.