Tartaletas de arándano. Un postre fácil, rápido y delicioso.

Con una lámina de pasta brisa refrigerada puedes preparar estos dulces bocaditos: son unas tartaletas rellenas de una crema de nata y queso, con mermelada de arándanos.

Cristina Alvarez, directora de Cocina Fácil
Cristina Alvarez

Directora de Cocina Fácil y periodista especializada en gastronomía

PASO A PASO PARA REALIZAR TARTALETAS DE ARÁNDANO: RESULTADO FINAL.
PASO A PASO PARA REALIZAR TARTALETAS DE ARÁNDANO: RESULTADO FINAL.
Cocina Fácil / RBA / A.J.J. ESTUDI, S.C.P.
10 Unidades:
25 min

5

(4 votos)

Dieta:

Vegetariana

Temporada:

Verano

Otoño

Técnica:

Horno

Tipo Plato:

Postres

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

No hay nada como un postre casero para sorprender en cualquier ocasión, y las tartaletas de arándanos son la elección perfecta. Con una base crujiente de pasta brisa y un relleno cremoso de nata y queso, coronado con una deliciosa mermelada de arándanos, este dulce es tan fácil de hacer que te sorprenderá. Además, la presentación individual en pequeñas tartaletas las convierte en una opción ideal para cenas especiales o meriendas improvisadas.

Aunque estas tartaletas parecen perfectas para el verano, gracias a la frescura de los arándanos que están entonces en temporada, también son un éxito en otoño e invierno. Su versatilidad permite adaptarlas a cualquier estación cambiando la mermelada por frutas de temporada o incluso añadiendo especias como canela o vainilla al relleno. La receta básica admite variaciones que se ajustan a todos los gustos.

Si esta receta de tartaletas te conquista tanto como a mí, te animo a probar también otras preparaciones con pasta brisa. Una opción salada que me encanta es la quiche de patatas queso y jamón, perfecta para una cena rápida. Y si prefieres seguir explorando postres, prueba las tartaletas de limón o la tarta tatin de manzanas golden, dos recetas que no fallan nunca.

Ingredientes paraTartaletas de arándano. Un postre fácil, rápido y delicioso.

  • 500 gramos de pasta brisa o quebrada refrigerada
  • harina
  • unas hojas de menta
  • Para la crema
  • 100 mililitros de nata para montar
  • 3 cucharadas de azúcar
  • 150 gramos de queso blanco para untar
  • 100 gramos de mermelada de arándanos

1. Estira la masa

Precalienta el horno a 180 ºC. Espolvorea harina sobre la mesa y estira la masa con un rodillo hasta obtener un grosor de unos 5 mm.

2. Corta discos

Usa un cortador o un vaso grande para cortar la masa en discos ligeramente más grandes que los moldes de tartaleta. Coloca cada disco en su molde presionando ligeramente para ajustarlo.

2. Corta discos

3. Hornea las bases.

Pincha la base con un tenedor para evitar que suba, cúbrela con papel sulfurizado y añade garbanzos secos para que actúen como peso. Hornea durante 12 minutos, retira del horno y deja enfriar antes de quitar el papel y las legumbres.

4. Prepara la crema.

Monta la nata junto con el azúcar. Añade el queso blanco y mezcla suavemente hasta obtener una crema homogénea.

4. Prepara la crema.

5. Rellena las tartaletas.

Vierte una capa de crema en cada base horneada, agrega una cucharada de mermelada de arándanos y cubre con más crema. Alisa la superficie y decora con hojas de menta fresca.

Si te han gustado estas tartaletas te recomiendo probar otras tres versiones que a mi me encantan:

  • Tartaletas de frutos rojos: Sustituye la mermelada de arándanos por una mezcla de fresas y frambuesas para un sabor más fresco y colorido.
  • Relleno de chocolate y avellanas: Añade cacao en polvo a la crema y decora con avellanas trituradas para un toque más intenso y goloso.
  • Versión cítrica: Mezcla ralladura de limón o naranja en la crema y añade una capa de curd de limón para un postre con un toque ácido.

La pasta brisa proporciona la textura crujiente perfecta para contrastar con la suavidad de la crema. El queso blanco aporta cremosidad sin resultar pesado, mientras que la nata añade ese punto de esponjosidad irresistible. Por otro lado, los arándanos, además de ser deliciosos, son ricos en antioxidantes, convirtiendo este postre en una opción mucho más saludable de lo que parece.

Las tartaletas de arándanos son un postre elegante, fácil y rápido de elaborar. Además, permiten adelantarlas con tiempo y tenerlas listas en la nevera, perfectas para cuando llegan visitas inesperadas. Su versatilidad las convierte en una base ideal para experimentar con otros sabores, y su presentación individual siempre causa sensación. Anímate a preparar estas tartaletas en casa y descubre lo sencillo que es conquistar a tus invitados con un dulce tan irresistible como estas tartaletas.

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