Uno de los postres más famosos del recetario tradicional de Cantabria es, sin lugar a dudas, la quesada pasiega . Elaborada con queso fresco o requesón, esta tarta tiene una textura, suave y cremosa, que conquista a todo el mundo. Hoy, damos una vuelta a esta receta tan popular de nuestra gastronomía y te descubrimos una quesada sin queso con anacardos, plátanos y nueces. Sí, sí, has leído bien: sin queso. Con un sabor a canela y limón delicioso, esta tarta está especialmente pensada para todas aquellas personas que no pueden tomar lactosa o que siguen una alimentación vegana o vegetariana, pero, evidentemente, gustará a todo el mundo. Y es que queda tan gustosa que no tiene nada que envidiar a la versión clásica. Es una auténtica maravilla para el paladar. A la que la lleves a la mesa, va a desaparecer en un santiamén. La quesada también se puede preparar con yogur natural como base o con leche condensada y calabaza . No te pierdas estas ideas porque quedan… irresistibles. Protagonistas: los anacardos Elaborada con muy pocos ingredientes y todos facilísimos de encontrar en las tiendas, esta quesada sin queso es sencillísima de hacer. Uno de los primeros pasos a la hora de realizarla, es colocar los anacardos en un cuenco con agua y dejarlos en remojo durante toda una noche. Con este gesto, además de hacer que este fruto seco sea más digestivo y saludable, conseguirás ablandarlo y que, luego, sea más fácil de triturar. Al día siguiente, colócalo en el vaso de la batidora y mézclalo bien con los huevos y el plátano hasta que quede una masa fina. Luego, agrega unas nueces picaditas, canela en polvo, sal, mantequilla derretida y ralladura de un limón y su zumo , y vuelve a batir. Al rallar el limón, acuérdate que debes limpiar bien la piel bajo el agua del grifo para evitar que tenga restos de suciedad. Por otro lado, ten presente que solo debes rallar el limón de forma superficial, sin tocar las partes blancas , para que estas no aporten un toque amargo a la tarta. En este punto, solo te quedará colocar la masa resultante en un molde redondo, que no sea muy alto, forrado con papel sulfurizado y cocerla en el horno durante unos 40 minutos. Sabrás que la quesada sin queso está en su punto cuando, al pincharla con un palillo, este salga limpio. Si todavía sale manchado y con trocitos, deja unos minutos más. Una tarta deliciosa Perfecta para tomar a la hora del desayuno o de la merienda, esta quesada sin queso también la puedes servir como postre en una comida de domingo o una celebración especial. Quedarás la mar de bien. Además, la puedes comer fría, a temperatura ambiente o templada . De cualquier manera está riquísima. Ideas y variantes para la quesada sin queso con anacardos, plátanos y nueces Nosotros hemos decorado esta quesada con plátanos y nueces, pero también puedes decantarte por unos frutos rojos . Quedará muy bien con fresitas, moras, frambuesas, arándanos o grosellas. Otra opción es verter un poco de mermelada de fresa. Y si te gusta el chocolate, puedes agregar unas virutas por encima. Para una presentación más clásica, espolvorea la tarta con un poco de azúcar glas y canela en polvo y agrega unas hojitas de menta . Al servir, puedes combinar esta tarta con un helado de vainilla . Le aportará un toque refrescante.