Dátiles rellenos con crema de anacardos y pistachos: el capricho exótico que necesitas probar

Un bocado elegante y delicioso que sorprenderá a tu paladar con una explosión de sabores

Cristina Alvarez, directora de Cocina Fácil
Cristina Alvarez

Directora de Cocina Fácil y periodista especializada en gastronomía

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DÁTILES RELLENOS DE CREMA DE ANACARDOS Y PISTACHOS.
Cocina Fácil / RBA / ANA GARCÍA
15 Unidades:
20 min

5

(4 votos)

Dieta:

vegana

Vegetariana

Temporada:

Todo el año

Técnica:

Sin cocción

Tipo Plato:

Aperitivos y tapas

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

Preparación con antelación

Los pastelitos son ese pequeño capricho que todos nos merecemos de vez en cuando y si ese bocado viene con inspiración de países exóticos, como estos dátiles rellenos de crema de anacardos y pistachos, la experiencia es mucho más que un simple dulce. Son como un billete directo a Oriente Medio, donde los frutos secos y los sabores intensos son los auténticos protagonistas.

Pero no pienses que estamos hablando solo de dulzura y placer. No, estos dátiles están repletos de nutrientes gracias a los anacardos y los pistachos. ¡Son auténticos superalimentos! Así que este capricho no es tan culpable como podría parecer. Cada bocado no solo es delicioso, sino que también contribuye al bienestar de tu organismo. Es una excusa perfecta para no sentirte mal por repetir este postre dos o tres veces.

Y lo mejor de todo es que estos dátiles rellenos son facilísimos de preparar. Puedes tenerlos listos en un santiamén, lo que los convierte en la opción ideal si quieres hacer algo rápido antes de que lleguen tus invitados. Los haces con antelación y te dedicas a disfrutar de la velada sin estar atrapado en la cocina. Con esta receta todo son ventajas.

Ingredientes paraDátiles rellenos con crema de anacardos y pistachos: el capricho exótico que necesitas probar

  • 15 Dátiles medjoul
  • 1 puñado de Pistachos
  • 120 gramos de Anacardos en remojo de 3 a 8 horas para la crema
  • ½ Limones el zumo y la ralladura para la crema
  • 1 pizca de Sal para la crema

1. Prepara la crema de anacardos.

Lo primero es remojar los anacardos en agua. Déjalos en un bol cubiertos de agua de 3 a 8 horas para que se ablanden bien. Si quieres agilizar este proceso, puedes dejarlos en remojo la noche anterior.

2. Haz la crema

Escurre los anacardos y colócalos en una batidora o procesador de alimentos. Añade el zumo de limón y una pizca de sal. Tritura todo hasta obtener una crema suave y homogénea. Si queda muy espesa, añade un poco de agua hasta lograr la textura deseada.

3. Prepara los dátiles

Coge los dátiles y hazles un corte a lo largo para retirar el hueso. Pero cuidado, no los cortes del todo, ya que necesitamos que mantengan su forma para poder rellenarlos.

4. Rellena los dátiles

Con una cucharita, introduce la crema de anacardos en el interior de cada dátil. Tienes que ser esplendido, sé generoso con el relleno, porque es lo que les dará ese toque delicioso que tanto nos gusta.

5. Decora con pistachos

Pela y pica los pistachos, colócalos en la parte superior de cada dátil, a modo de decoración. Esto les dará un toque crujiente y salado que contrasta perfectamente con la dulzura del dátil y la cremosidad del interior.

6. Sirve y disfruta

Ya tienes tus dátiles rellenos listos para servir. Lo mejor es disfrutarlos en el momento, pero también aguantan bien en la nevera si prefieres prepararlos con antelación.

El truco

Si los sirves fríos tienen más cuerpo. Si te gusta el cacao, estos mismos dátiles los puedes bañar en chocolate.

Puedes darle un toque personal variando los ingredientes para aclimatarlos a tu gusto y si, como yo, tenéis predilección por los cacahuetes, probad a sustituir los anacardos por una crema de cacahuete, os adelanto que a día de hoy no es difícil encontrar esta crema envasada en los supermercados. Eso sí, asegúrate de que no tenga sal para que el contraste de sabores siga siendo tan equilibrado como en la receta original. También puedes jugar con otros frutos secos, como las almendras, si te apetece experimentar.

La presentación de estos dátiles es clave para que brillen en cualquier mesa. Si vas a servirlos en una cena informal, lo mejor es colocarlos en un plato bonito o una bandeja pequeña y que cada cual se sirva a su antojo. Pero si quieres darles un aire más festivo, imagina estos dátiles en pequeñas cucharitas individuales o en mini platos decorativos. Incluso puedes añadir un toque de hojas de menta o espolvorear un poco de pistacho triturado por encima para darles un acabado más sofisticado. Perfectos para una celebración ¡Incluso para Navidad!

Te aseguro que preparar estos dátiles rellenos en casa es todo un acierto. No solo por lo fácil y rápido que es hacerlos, sino porque el sabor es increíblemente único. Si eres fan de los frutos secos, esta receta te va a encantar. Además, son perfectos para sorprender a tus amigos o familia en cualquier ocasión. Así que no lo dudes, atrévete a prepararlos y disfruta de este pequeño capricho que, lejos de ser un placer culpable, es un manjar saludable que te hará quedar de maravilla.

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