Si la cocina nipona está entre tus favoritas, no puedes perderte esta receta sencillísima: un pastel japonés superesponjoso , en versión saludable y ligera, por supuesto, ¡muy brutal! Este pastel japonés solo necesita dos ingredientes y unos pocos minutos de elaboración, por lo que se trata de una receta perfecta para preparar en casa y salir de un apuro rápidamente. Un postre rápido, original y divertido que podrás disfrutar en menos un cuarto de hora. A pesar de que no lleva queso, se asemeja mucho a un cheesecake japonés sin horno, por su textura y su ligereza. Además, puedes ponerle la guinda con un poquito de edulcorante glas por encima, incluso adornarla con unos frutos rojos para añadir algo de color al resultado final.