Solo con mirar este bizcocho japonés con chocolate negro y fresitas , entran unas irrrefrenables ganas de meter el cuchillo y cortar un pedazo para probarlo. Y es que tiene tan buen aspecto... Este bizcocho se caracteriza por su especial esponjosidad . En la elaboración, además de batir bien los ingredientes, como las claras a punto de nieve y las yemas, blanqueadas con el azúcar por separado, luego se hornea al baño maría, con un recipiente dentro de otro con agua. También bajamos la temperatura a media cocción. Así, el resultado es perfecto. La otra clave es la cobertura de chocolate negro , mezclado con nata. La mitad se echa por encima del bizcocho y el resto se mete en una manga pastelera para decorar. De la repostería japonesa también es muy conocida su tarta de queso , igualmente esponjosa. Para que este bizcocho japonés quede tan esponjoso hay que trabajar bien los ingredientes, por lo que es algo laborioso. Si quieres un pastel japonés con solo 2 ingredientes y menos trabajo, mira nuestra videorreceta.