Menú de Navidad barato y fácil: entrante, primer y segundo plato y postre para triunfar sin derrochar

Todos los años la misma pregunta: ¿qué preparar en Navidad que sea fácil, rico, resultón y económico? Aunque suene a misión imposible, en realidad no lo es tanto si cumples dos requisitos fundamentales: planificarlo con antelación y ceñirte a tu presupuesto.

Las prisas de última hora no son buenas y siempre salen caras, de ahí que lo aconsejable sea ir pensando en el menú de Navidad con varias semanas de antelación. Esto te permitirá ir controlando los precios en el supermercado, adelantarte a la inevitable subida antes de las fiestas y sopesar otras opciones más originales y económicas.

¿Es aconsejable comprar por adelantado? Si se trata de alimentos que puedas congelar o no se estropeen enseguida, sí; pero ojo también con las ofertas, porque muchas en realidad no lo son o no resultan tan rentables como parece.

El tema del presupuesto también es importante. Haz números y establece una cifra realista que deberás respetar; te resultará más fácil hacerlo si vas al supermercado siempre con la lista de la compra y directo a los productos que necesitas. Piensa que no tiene mucho sentido tomarte la molestia de buscar opciones de menús baratos y de repente ceder al impulso de meter productos que no necesitas (por muy apetitosos que resulten) en el carrito de la compra.

Para que te sirva de inspiración, hemos preparado un menú tipo compuesto por un aperitivo navideño, un primer plato ligero, un segundo más contundente y un postre. A partir de ahí, podrás adaptarlo a tus propias necesidades; por ejemplo, si no quieres poner aperitivo, puedes servir un entrante más importante, compensando siempre cantidades e ingredientes.

Esto último es importante para vigilar el precio, ya que una sencilla ensalada o un inofensivo canapé te pueden salir carísimos si empiezas a añadirle ingredientes sin ton ni son. Es preferible invertir en una pieza de carne de buena calidad y hacerla al horno con una guarnición a base de patatas y cebolla.

De aperitivo, hojaldritos de jamón y queso

El aperitivo va a ser la carta de presentación de tu menú, por eso es importante cuidarlo, presentarlo adecuadamente y no encarecerlo inútilmente. Evita también servir demasiados o tus invitados se empacharán y no llegarán al postre. Una buena idea son los aperitivos con hojaldre, ya sean tartaletas, hojaldritos o volovanes.

Las láminas de hojaldre son muy económicas, más todavía si las compras en packs indivisibles. Son muy fáciles de hornear, puedes darles la forma que quieras y combinan con un montón de ingredientes dulces y salados. Un aperitivo muy interesante que puedes preparar utilizando solo 1 lámina son estos hojaldritos con jamón y queso y salsa de tomate, muy rico y con un aire italiano que gusta a todos. Si te fijas, son ingredientes muy sencillos que es probable que incluso ya tengas en casa. Si lo prefieres, por hacerlo más especial puedes sustituir el tomate por salsa pesto. Riquísimo también.

Como entrante, ensalada de endibias con uvas y granada

Para contrarrestar el hojaldre y preparar para el segundo plato, te proponemos algo tan ligero como delicioso: una rica y elegante ensalada de endibias con uvas moradas y granada, que puedes sustituir sin problema por otras frutas como fresas, uvas verdes o melocotón. Aunque lleva nueces, también está buenísima con pistachos, piñones o pasas, que quizá también tengas en casa y puedas aprovechar.

En cuanto al emplatado, quedará muy bonita y colorida la disposición en forma de flor. Si quisieras hacerlo en forma de barquitas, tendrías que cortar los ingredientes más menuditos para que se viera más fino y cupiera mejor.

El plato principal, pollo asado con mandarinas

Como segundo plato de Navidad, descarta por su elevado precio el pescado y el marisco y opta por un ave, en concreto el pollo. Ten en cuenta que si es de granja, será más caro (aunque estará más bueno) que el corriente. Para darle un toque festivo, original y refrescante lo asaremos con mandarinas. Llevará al menos hora y media, ¡pero es un triunfo seguro! Como guarnición, puedes servir unas patatas panadera o incluso un arroz basmati aromatizado con especias.

Y para terminar, postres en vasitos

Además de la macedonia, los postres en vasitos son la opción más barata y resultona que puedes servir en Navidad. Aquí te ofrecemos un modelo para que te sirva de ejemplo, pero tienes muchísimas opciones ante ti: lo único que tienes que hacer es tirar de creatividad. Por ejemplo, como base puedes utilizar restos de bizcocho, sobaos, cereales o galletas que tengas en casa. También están muy buenos con las típicas galletas Lotus, pero, a no ser que ya las tengas en casa, descártalas porque subirán de precio. Hay muchos postres navideños que puedes hacer, pero ten en cuenta su presupuesto antes de elegir. 

La crema puede ser desde nata montada a queso batido o de untar, pasando por yogur griego. Mermelada, compota o fruta al natural o en almíbar darán el toque de color. Y como topping, lo que quieras: trocitos de chocolate, almendras laminadas o coco rallado.