Macarons para principiantes (sin harina de almendra)

Estos deliciosos bocaditos de origen francés son irresistibles. Si te apetece hacerlos y buscas una receta fácil, aquí tienes una, con harina común, que siempre sale. ¿Empezamos?

Rosa Mestres
Rosa Mestres

Periodista especializada en gastronomía

isabel lloret
Isabel Lloret

Cocinera

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Cocina Fácil / RBA / Isabel Lloret

Macarons (sin harina de almendra)
Cocina Fácil / RBA / Isabel Lloret

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Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

Son muchos los amantes de la repostería francesa que, aunque les encantan los macarons, no se atreven a prepararlos en casa porque no acaban de salirles bien. No son los dulces más fáciles de hacer, no nos engañemos...

Si a ti también te pasa lo mismo, a partir hoy, con esta videorreceta que te hemos preparado desde Cocina Fácil, ya no tendrás excusas porque te van a salir perfectos. 

Y, para que te conviertas en toda una experta en el arte de hacer macarons, también te ofrecemos algunos consejos y pasos clave que te van a ir muy bien.

Ingredientes paraMacarons para principiantes (sin harina de almendra)

  • 70 gramos de harina
  • 100 gramos de azúcar glas
  • 55 gramos de azúcar
  • 65 gramos de claras de huevo
  • colorante alimentario en pasta o en gel

1. Tamiza el azúcar glas y la harina

Pon un colador grande sobre un cuenco, agrega el azúcar glas y la harina y agita suavemente para que las partículas vayan pasando y queden bien tamizadas. Reserva.

2. Bate las claras

Separa yemas y claras, y bate estas con unas varillas eléctricas on el azúcar normal, a máxima potencia hasta obtener un merengue muy estable, firme y brillante. A continuación añade la harina y el azúcar glas tamizados. Lo tienes que hacer poco a poco e ir removiendo con una espátula de silicona, en movimientos envolventes.

3. Consigue una masa elástica

No hay que ponerlo todo de golpe. Lo ideal es hacerlo en dos o tres veces. Tiene que quedarte una masa elástica con la que puedas dibujar el número 8 durante 3 veces sin que se rompa.

4. Añade colorante

Opcionalmente, puedes añadir a la masa colorante alimentario, como en nuestros macarons, que los hemos teñido de rosa.

5. Reparte la masa

Ahora llega el momento de escudillar los macarons. Puedes hacerlo sobre un molde de silicona especial para macarons o en una bandeja de horno forrada con papel sulfurizado, procurando dejar bastante espacio entre ellos para que, luego, no se toquen. Cuando termines de hacerlo verás que se forman unas burbujas de aire. Revienta esas burbujitas con la ayuda de un palillo y deja secar los macarons, si puedes al sol, durante dos horas.

6. Cuece en el horno

Una vez pasado ese tiempo, verás que se han secado si al pasar el dedo no manchan. Precalienta el horno a 150 °C, con calor arriba y abajo, y el ventilador apagado, y cuece los macarons durante 15 minutos.

7. Enfría y rellena

Déjalos enfriar encima de una rejilla a temperatura ambiente. Cuando estén fríos, despégalos y rellénalos si quieres con una crema de avellanas, mermelada o un frosting que te guste.

El truco

Puedes usar diferentes colorantes para que tengan varios colores tus macarons.

Consejos para la masa

Para que los macarons queden crocantes por fuera y suaves y blanditos por dentro, es importante prestar mucha atención al preparar la masa. Por un lado, debes conseguir un merengueque quede muy denso y brillante. Hasta que no se formen picos, no lo des por acabado y sigue batiendo.

Por otro lado, una vez incorpores la harina tamizada al merengue, es fundamental que la masa adquiera una textura suave y fluida, pero no líquida. Estará en su punto cuando, al levantar la espátula cargada de masa, esta caiga "a punto de cinta" (tiene que caer de forma continua, no a pegotes, y haciendo pliegues como una cinta). Si te queda demasiado líquida, es que la has batido demasiado y los macarons no te saldrán bien.

Deja secar los macarons

Antes de hornear los macarons, es fundamental dejarlos secar bien ya que, si no, tras la cocción, te pueden quedar agrietados. Ponlos en un lugar seco, y si puedes, soleado. Un truco para saber que están listos es tocarlos con la punta de los dedos. Si notas que se ha formado una costra dura, que no mancha, ya los puedes hornear.

La temperatura ambiente influirá mucho en el secado de los macarons. En verano tardarán unos 35-45 minutos. En cambio, en invierno, puedes tener que esperar hasta 2 horas. Por otro lado, si llueve o hay mucha humedad en el ambiente, mejor que hagas tus macarons en otro momento.

Utensilios que te ayudarán

Otro de los secretos para que los macarons queden estupendos es en el momento de repartir la masa. Para que te queden del mismo tamaño puedes usar un mantel de silicona especial para hornear los macarons, con los círculos marcados. Lo encontrarás en grandes superficies y tiendas de menaje.

También puedes dibujar unos círculos sobre un papel de horno con ayuda de la boquilla y colocar un tapete de silicona transparente encima.

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