Kringle, la corona dulce de la abuela de Estonia que querrás probar sí o sí esta Navidad

Si te gusta la canela, adorarás este pastel típico navideño de origen escandinavo, perfecto para tomar en familia esta Navidad.

Isabel Zuñiga
Isabel Zúñiga

Redactora especializada en recetas de cocina

Kringle, postre estonio
Istock
6 personas

5

(2 votos)

Técnica:

Horno

Precio:

€ €

Dificultad:

Media

Hoy hacemos las maletas imaginarias y viajamos virtualmente hasta Estonia para descubrir uno de sus mayores tesoros, el kringle, un vistoso pastel típico navideño con origen escandinavo que recuerda tanto a los tradicionales rollitos de canela como a los pretzels salados. Su principal característica es que es estriado y redondo, de hecho el término proviene del nórdico antiguo kringla, que significa anillo o círculo.

Al igual que sucede con otros postres que llevan levadura, como nuestro roscón de Reyes, el kringle no es un postre difícil pero sí algo laborioso que requiere sobre todo tiempo y paciencia. Lo primero que tienes que saber es que no lleva harina normal sino harina de fuerza, que está elaborada con distintas variedades de trigo y tiene mayor contenido en gluten.

En cuanto a la levadura, puedes utilizar la levadura fresca prensada que es esa que encuentras en la zona de refrigerados, viene en porciones rectangulares y necesita ser disuelta. ¿Y si resulta que tienes levadura seca en casa? Puedes usarla sin problema teniendo en cuenta que la seca equivale a un tercio de la fresca, es decir, que bastaría con 5 gramos de levadura seca para sustituir los 15 gramos de la seca que te pide esta receta. Lo que en ningún caso te funcionaría sería la levadura química tipo Royal, también conocida como polvos de hornear.

Vamos ahora con el relleno. Si te gustan los frutos secos, te encantará este con almendra molida y nueces muy picaditas y un aroma riquísimo a canela, tan típico de los meses de otoño e invierno. Por último, también lleva un ligero glaseado que aporta textura y cierto brillo. Conseguir su característico aspecto estriado es más sencillo de lo que parece, ya que se trata de una trenza enroscada, como verás a continuación.

Ingredientes paraKringle, la corona dulce de la abuela de Estonia que querrás probar sí o sí esta Navidad

  • 300 gramos de harina de fuerza
  • 15 gramos de levadura fresca prensada
  • 120 mililitros de leche
  • Ralladura de 1 limón
  • 1 yema de huevo
  • 1 clara de huevo
  • 30 gramos de azúcar
  • 60 gramos de azúcar glas
  • 30 gramos de mantequilla pomada
  • Sal
  • Para el relleno
  • 100 gramos de azúcar moreno
  • 2 cucharadas de canela
  • 50 gramos de almendra molida
  • 50 gramos de nueces muy picadas
  • 80 gramos de mantequilla pomada

1. Prepara la masa

Disuelve la levadura en la leche templada. En un bol grande pon la harina, el azúcar, la ralladura y una pizca de sal. Haz un hueco en el centro y agrega la leche y la yema de huevo. La idea es ir incorporando poco a poco todos los ingredientes hasta que coja consistencia de masa y puedas trabajarla con las manos sobre una superficie enharinada.

2. Reposo de la masa

Forma una bola con la masa y colócala de nuevo en el bol ligeramente enharinado. Tapa con film transparente y un paño limpio, y deja que repose en un lugar cálido sin corrientes de aire hasta que duplique su tamaño, por ejemplo dentro del horno apagado pero con la luz encendida.

3. Prepara el relleno

Calienta la mantequilla en el microondas hasta que se derrita; hazlo en pequeñas ráfagas para evitar que llegue a hervir. Agrega las nueces, las almendras, el azúcar y la canela. Mezcla bien y reserva.

4. Rellena la masa

Cuando la masa esté lista, amásala un poco sobre una superficie enharinada para desinflarla. Extiéndela con un rodillo y forma un rectángulo de 40 x 50 centímetros. Reparte el relleno por toda la superficie sin apurar demasiado hacia los bordes. Enrolla por el lado largo de tal forma que te quede un cilindro.

5. Trenza la masa

Corta el cilindro en dos a lo largo, teniendo la precaución de no llegar hasta el final en uno de los extremos, más o menos unos 2 centímetros. Es por esa zona por donde empezarás a trenzar la masa, procurando dejar hacia arriba la parte estriada. Una vez la tengas lista, colócala sobre la bandeja de horno forrada con papel sulfurizado y enróllala dándole forma de espiral. Cierra los extremos asegurándote que quedan bien sellados. Puedes aplicar unas gotas de agua para facilitar la tarea.

6. Hornea el kringle

Hornea en el horno precalentado a 180 ºC durante 25 minutos, o hasta que veas que está dorado. Mientras tanto, pon en un bol la clara de huevo y el azúcar glas y mezcla hasta formar una glasa. Pincela la trenza justo cuando la saques del horno y deja que se enfríe sobre una rejilla.

Trucos para que el kringle sea todo un éxito

  • Para acelerar el proceso de levado, puedes dejar la masa dentro del horno con la luz encendida. Si tu horno no tiene luz, introduce también un bol con agua caliente al lado del bol que contiene la masa y ve cambiando el agua según vaya enfriándose. 
  • ¿Te gustan las pasas? Añádelas al relleno previamente hidratadas. En cuanto al glaseado, puedes prescindir de él y sustituirlo por azúcar glas. 
  • El kringle está tan rico que es difícil que dure de un día para otro. Pero si así fuera, puedes quedarte tranquilo porque el glaseado que lleva permite que se mantenga esponjoso al menos 2 días más. Eso sí, no lo dejes a la intemperie y guárdalo en un recipiente hermético. 
¿Has preparado esta receta?

Marcar como cocinada

Notas de cocina

Comparte las notas de tu cocinado con otros usuarios o envía un mensaje privado

Mis notas
Las más útiles
Todas

¿Te ha gustado esta receta?

Puedes guardarla en tus favoritos, imprimirla o compartirla