Hay días en los que parece que el tiempo no alcanza para nada, pero eso no significa que tengamos que renunciar a una buena comida casera, Es más, es en este tipo de días cuando un buen plato tradicional es más necesario de nunca, para cargarnos a tope de esa energía que tanta falta nos hace . Este guiso de bacalao y garbanzos es la prueba de que se puede comer bien, sano y rico sin tener que pasar horas en la cocina. Lo mejor de todo es que solo necesitas unos cuantos ingredientes básicos, muy baratitos y un microondas para tener un plato espectacular en tu mesa en menos de 20 minutos. Si me preguntas por el resultado de esta receta al microondas, te digo que estamos ante un plato de cuchar a lleno de sabor mediterráneo, con el toque salado del bacalao, la suavidad de los garbanzos y un caldo ligero que reconforta cuerpo y alma. Sano, nutritivo y cargado de sabor, este plato lo tiene todo para triunfar. Anímate a preparar esta y otras recetas al microondas el ahorro de energía y de tiempo es francamente impresionante y con un poco de mimo y el mínimo de técnica puedes sacarle rendimiento en forma de bocados deliciosos. Vamos con la receta, os adelanto que es sencillísima. Alternativas para esta receta En cuanto a las variantes, puedes modificar este plato para adaptarlo a tu gusto. S i no te gusta el bacalao usando merluza obtendrás un plato más suave pero igualmente delicioso, también podrías añadir el bacalao en forma de albóndigas. Si te interesa hacer el plato más digestivo puedes reducir la cantidad de garbanzos y añadir patatas o calabacín, te garantizo que queda muy rico. ¿Necesitas una versión vegetariana? No hay problema, cambia el pescado por unos espárragos y en vez de caldo de pescado opta por un caldo vegetal. Este guiso tiene todo lo que buscamos en una receta exprés: sabor, nutrientes y versatilidad. Los garbanzos aportan esa textura cremosa que contrasta de maravilla con el bacalao y las espinacas, mientras que el caldo de pescado une todos los sabores en un plato tradicional y que gusta a todo el mundo. Además, es ideal tanto para una comida de domingo en familia como para un fantástico plato de diario con el que rellenar el tupper del trabajo.