Esta receta es un ejemplo perfecto de cómo la combinación de ingredientes básicos, en la cocina, puede crear un plato delicioso y nutritivo. Esta ensalada de garbanzos, pimiento, cebolla y tomate es un homenaje a los sabores mediterráneos , con ingredientes frescos y saludables que se mezclan en perfecta armonía. Los garbanzos aportan una textura firme, mientras que el pimiento, la cebolla y el tomate agregan un toque de frescura y color. Puedes cocer los garbanzos , con sus 12 horas de reposo, en olla exprés o tradicional, pero es más rápido utilizar garbanzos cocidos de conserva. Hemos aliñado nuestra ensalada con aceite de oliva extravirgen, sal y limón, pero si prefieres el toque del vinagre, queda igual de bien. Y si quieres un aliño más elaborado, mira estas cinco vinagretas: Más ingredientes para tu ensalada de garbanzos Lo bueno de esta ensalada de garbanzos es que puedes personalizarla a tu gusto, añadiendo ingredientes que te gusten y eliminando los que no. Aquí tienes algunas ideas: Aceitunas: negras o verdes, añaden un toque salado y sabroso. Queso: puedes elegir feta, desmenuzado; queso fresco, queso curado, brie e incluso queso azul. Zanahoria: rallada o cortada a daditos pequeños, añade un toque de dulzura y color a la ensalada. Maíz: el maíz cocido o enlatado puede aportar un toque de dulzura y textura a la ensalada. Palitos de surimi: son una opción deliciosa para agregar un toque de marisco a la ensalada. Anchoas: las anchoas en aceite aportan un sabor salado y umami que complementa bien los garbanzos y las verduras. Aguacate: el aguacate agrega una cremosidad y un sabor suave a la ensalada. Huevos duros: cortados en rodajas, rallados o picados añaden proteína y un toque de suavidad. Frutos secos: nueces, almendras, pipas de girasol o de calabaza, anacardos... los frutos secos añaden un toque crujiente y un extra de sabor. Uvas pasas sin pipa: que aportan un toque de dulzura y textura.