Para que la crema quede perfecta, es importante eliminar los restos de tierra que tengan los champiñones . Para conseguirlo, pásales un trapo húmedo o lávalos brevemente bajo el agua del grifo. No los dejes en remojo porque absorberían demasiada agua y la receta no quedaría tan rica. Y, antes de verter el caldo de verduras, no te olvides de rehogar los champiñones y el puerro, por separado. Así el plato ganará todavía más sabor. El aceite verde , preparado con perejil, se rocía alrededor de la crema y de los champiñones laminados que se dejan en el centro. Si quieres otras recetas ligeras para disfrutar sin sufrir por las calorías, no te pierdas este artículo: Si te gustan los champiñones, fíjate en: