Hace nada estábamos inmersos en la preparación de las fiestas navideñas y ¡ya estamos en plena Cuaresma a punto de entrar en la Semana Santa! Y justo esta época trae consigo una gastronomía particular muy marcada (no te pierdas nuestras recetas de Cuaresma ) por el precepto de la abstinencia de comer carne, lo que hace que sean muchos los que buscan opciones para comer bien prescindiendo de este alimento . En esta ocasión viajamos virtualmente a Mallorca para saber más sobre los cocarrois mallorquines, unas empanadas rellenas de diversas verduras, como la acelga o la cebolla. Su forma de media luna te hará reconocerlas enseguida. Si te gusta este tipo de formatos , también puedes animarte a preparar los panadons rellenos de espinacas (receta de la abuela leridana), las empanadas de pisto, berenjena y huevo , o las empanadas criollas de chorizo y provolone . En realidad se trata de un tentempié más que de un plato en sí mismo pero lo que está claro es que es nutritivo, saciante y muy energético . También resulta muy cómodo para comer, por ejemplo si te lo llevas a la oficina o de excursión. La receta se compone de dos partes: la elaboración de la masa y la preparación del relleno. No es complicado y merece mucho la pena ya que podrás rellenarla con lo que más te guste. Aunque tradicionalmente lleva manteca , hemos prescindido de ella; si quisieras añadirla, utiliza la misma cantidad que de aceite y agua (en este caso serían 250 gramos). En relación con el resto de ingredientes, poco más que contar salvo que en vez del manojo de acelgas tal cual, podrías utilizar una bolsa de las que ya vienen cortadas y envasadas, que también es muy práctico. También está muy rico el relleno si le añades pasas , puesto que ofrece un contraste muy interesante, aunque no le gusta a todo el mundo. Más recetas mallorquinas ¿Te interesan los platos con verduras como los cocarrois? Prueba el tumbet mallorquín con patatas, berenjenas, pimientos y tomate. Todas las verduras van sofritas en su punto de cocción y luego se montan tumbadas, de ahí el nombre. Otra receta deliciosa es el frito mallorquín , uno de los platos más antiguos de su gastronomía que solía prepararse con asadura de cordero. Actualmente lleva lomo de cerdo, que queda muy tierno, y verduras bien pochaditas. Se acompaña de pan de pueblo. ¿Te apetece algo dulce? Aquí tienes el gató de almendras , un bizcocho fácil sin gluten originario de las Islas Baleares cuyo nombre proviene del francés gâteau (literalmente, pastel), lo que corrobora su influencia de la cocina francesa. Apunta también la coca de cuarto mallorquina , perfecta para el desayuno o merienda. Se prepara fácilmente con solo tres ingredientes y su textura es muy esponjosa. No lleva levadura sino que claras y yemas se baten a conciencia.