Hay días en los que lo único que apetece es un plato caliente, que te reconforte por dentro y te abrace como si fuera una manta. Esos días en los que el frío se mete hasta en los huesos y lo único que deseas es estar en casa, relajado, con una comida casera delante que te haga sentir bien. Para esos momentos, no hay mejor opción que un buen caldo de verduras con pasta corta. Sencillo, rápido y lleno de sabor. Y lo mejor es que prácticamente se cocina solo. Te confieso que esta receta es uno de mis grandes aliados cuando quiero algo reconfortante pero no tengo ni mucho tiempo ni ganas de cocinar. No hay excusas para no prepararlo, incluso si no eres el mejor cocinero del mundo o no tienes muchos ingredientes frescos, con esta receta todo tiene solución, porque además del caldo de verduras envasado, solo necesitas perejil rizado y la pasta seca. En poco más de un cuarto de hora tienes lista una sopita deliciosa. Solo necesitas darle tu toque personal, y en pocos pasos tendrás un plato redondo. Lo mejor de todo es que es fácil de cocinar y también saludable y muy económico, lo cual es siempre un plus. Este caldo de verduras con pasta corta es perfecto para cualquier ocasión , pero, sobre todo, es el plato estrella cuando el frío aprieta. Lo que me encanta de esta receta es lo fácil que es personalizarla. Si tienes más tiempo y te animas a hacer un caldo de verduras casero , será aún más sabroso que con uno comprado en el supermercado. Solo necesitas unas zanahorias, cebolla, apio y un poco de paciencia. Pero, si andas con prisa, un buen caldo envasado, como hemos utilizado en esta receta, te solucionará la vida en cuestión de minutos. La pasta corta es mi preferida para este tipo de platos porque mantiene su forma y da textura al caldo, pero no te limites. Si en casa tienes fideos, espirales o cualquier otro tipo de pasta, adelante, usa lo que más te guste. Incluso puedes añadir más verduras frescas o algunas especias si buscas algo diferente. No sé si a ti también te pasa, pero cuando llega el frío, mi cuerpo pide a gritos platos calientes. Y no hay nada mejor que algo tan reconfortante como este caldo. Es una de esas recetas que te cuidan por dentro y por fuera. Lo mejor es que no necesitas ser un experto para prepararlo. Es tan sencillo que lo puede hacer cualquiera, incluso en esos días en los que estás agotado y solo quieres descansar. La próxima vez que estés buscando algo sencillo, rápido y lleno de sabor para esos días fríos, te invito a que pruebes este caldo de verduras con pasta corta. Es una receta que no solo te reconfortará, sino que también te hará sentir bien contigo mismo. Es económica, fácil de hacer y, sobre todo, te traerá ese calorcito que tanto necesitas en los días de invierno. Te va a encantar.