Bizcocho de verano con cerezas, superesponjoso y facilísimo

Este no es un bizcocho normal, es un superbizcocho. Porque la masa incorpora cerezas frescas y porque se hornea con un crumble en la capa superior que le da una mordida crujiente

Cristina Alvarez, directora de Cocina Fácil
Cristina Alvarez

Directora de CocinaFácil.com

Bizcocho de cerezas
GTres
8 personas
75 min

4

(4 votos)

Tipo Plato:

Postres

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácl

¿Sabes esa sensación de cerrar los ojos cuando muerdes algo exquisito? ¿Algo que está crujiente por fuera pero que a la vez es muy esponjoso y delicado?

Pues todas esas sensaciones las vas a tener cuando pruebes este superbizcocho. Y cuando te encuentres las cerezas en el interior de la masa tierna, y su sabor fresco inunde toda tu boca, entonces creerás haber llegado al cielo.

Las cerezas son una fruta de verano, por eso hemos llamado a este postre bizcocho de verano. Pero hay muchos otras elaboraciones dulces con cerezas perfectas para aprovechar esta fruta cuando está de temporada.

La masa del bizcocho no tiene nada de particular, se elabora con huevos, harina, azúcar y mantequilla. Eso sí, lleva crema agria, un ingrediente que aporta humedad al bizcocho

¿Qué es la crema agria?

En inglés la llaman sour cream y es un derivado lácteo fermentado. Se elabora a partir de la crema de leche y las bacterias que se le añaden convierten los azúcares naturales en ácido láctico, dándole un característico sabor ácido y una textura espesa. 

Si no sueles usar crema agria, no tienes en casa o no la encuentras en el súper, puedes sustituirla por yogur. Eso sí, que no sea azucarado para que el sabor del bizcocho no sea demasiado dulce.

Ingredientes paraBizcocho de verano con cerezas, superesponjoso y facilísimo

  • 300 gramos de cerezas
  • 2 huevos L
  • 190 gramos de azúcar glas
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • 85 gramos de crema agria
  • 260 gramos de mantequilla
  • 315 gramos de harina con levadura
  • 1 cucharadita de levadura en polvo
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 70 gramos de azúcar moscovado
  • 50 gramos de nueces peladas

1. Prepara el crumble

Dispón en un cuenco 85 gramos de mantequilla fría cortada en trozos y 140 gramos de harina, y mezcla bien con las yemas de los dedos hasta que tengan la textura de unas migas. Añade el azúcar moscovado.

2. Agrega las nueces

Repela las nueces, eliminando la pielecilla exterior que las recubre, pícalas ligeramente y añádelas también al crumble. Mezcla. 

3. Prepara los utensilios

Precalienta el horno a 180°. Forra con papel sulfurizado un molde redondo desmontable de 20-22 centímetros de diámetro. 

4. Prepara las cerezas

Lava las cerezas y sécalas con papel de cocina. Reserva 5 o 6 enteras para decorar el bizcocho y deshuesa las demás. 

5. Haz la masa del bizcocho

Bate la mantequilla restante, previamente ablandada, con 175 gramos de azúcar glas, mejor con varillas eléctricas. Agrega los huevos, la vainilla y la crema agria, y sigue batiendo. Añade a la mezcla 175 g de harina, tamizada con la levadura y la sal, y mezcla de nuevo, esta vez con una espátula. Incorpora las cerezas deshuesadas a la masa del bizcocho y remueve. 

6. Enmolda y hornea

Vierte la masa en el molde preparado y nivélala con una espátula. Reparte el crumble por encima de esta masa e introduce el molde en el horno. Hornea durante 1 hora. 

7. Comprueba la cocción

Pasado este tiempo, comprueba la cocción pinchando el centro del bizcocho con una brocheta de madera: si sale limpio, está hecho. Si sale sucio, cuece unos minutos más. 

8. Decora y sirve

Deja enfriar el bizcocho y desmóldalo. Decora con las cerezas reservadas y espolvorea con azúcar glas. 

El truco

Convierte este bizcocho en un postre especial acompañándolo con helado de vainilla. ¡Delicioso!

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