Empezar el día con buen pie es el objetivo que todos nos planteamos en nuestra vida diaria. Si bien es cierto que los hay que tienen un mal despertar, supongo que la mayoría de nosotros intentamos, en la medida de lo posible, que el proceso de levantarnos después de nuestras horas habituales de sueño, sea lo menos traumático posible.
Y quizás por eso, empezar con el mejor desayuno es vital. Mario Casas, actor, lo tiene clarísimo y, para ello, nada menos que empezarlo con una receta que él mismo ha bautizado y que me parece ideal. Es el Zocotroco, un vaso de galletas con leche que le da la dosis de energía que necesita, se trata tan solo de "poner leche fría en un vaso, coger mogollón de galletas y meterlas en él hasta que sean cemento. Cuando las galletas son casi cemento, pa dentro".
![Zocotroco, galletas con leche](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 1069"%3E%3C/svg%3E)
Istock
Zocotroco
Para 1 persona
Ingredientes
- 200 mililitros de leche fría
- Galletas María o cualquier galleta de tu elección
Paso a paso
Prepara el vaso
Vierte 200 mililitros de leche fría en un vaso grande o un tazón de desayuno amplio, para que luego puedas mezclar las galletas sin que se derrame la leche.
Agrega las galletas
Agrega las galletas una a una o de dos en dos y remójalas bien en la leche hasta que se ablanden totalmente. Haz lo mismo con las demás galletas, hasta conseguir una especie de puré de galletas.
Decora al gusto
Ya puedes degustar el zocotroco (puedes espolvorearlo con canela, cacao en polvo o incluso una mezcla de especias tipo speculoos si eres amante de los sabores nórdicos).
La opción de Mario Casas me parece ideal (y seguro que si propones una votación, será la receta favorita de los más pequeños y sorprendentemente, de muchos de los adultos). Yo sigo pensando que un zocotroco con galletas de chocolate y espolvoreado con canela, sería aún más rico que el básico (aunque más calórico, sí).
Añadir fruta al desayuno sigue siendo una de las mejores opciones y de las más equilibradas, pero en el día a día, la pereza de cortar la fruta a gajos y presentarla es inversamente proporcional al tiempo del que disponemos antes de ir al trabajo.
Por ello, te propongo dejar preparado con antelación un fantástico pudding de croissants con frambuesas. Se trata de una receta muy sencilla que solo comporta tener disponibles en casa cruasanes, leche, huevos, azúcar y frambuesas (también lo puedes preparar con otras frutas rojas como moras, arándanos o fresas)
![Pudding de croissants con frambuesas](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 1200"%3E%3C/svg%3E)
Pudding de croissants con frambuesas.
Pudding de croissants con frambuesas
Para 4 personas
Ingredientes
- ½ litro de leche
- 8 croissants
- 4 huevos
- 150 gramos de azúcar
- 200 gramos de frambuesa
- Azúcar glas
Paso a paso
Prepara la base
Casca los huevos en un cuenco, añade el azúcar y bate ligeramente con unas varillas manuales. Parte cada croissant en 3 trozos más o menos del mismo tamaño. Vierte la leche en un cazo, ponla al fuego y cuece hasta que llegue a ebullición. Agrégala a la mezcla de huevos.
Prepara las frambuesas y precalienta el horno
Precalienta el horno a 180 °C. Lava las frambuesas, sin dejarlas en remojo, y sécalas con papel de cocina. Repártelas con los trozos de croissant en un molde rectangular, de paredes no muy altas.
Monta el pudding
Vierte en el molde la preparación de leche y presiona los trocitos de croissant ligeramente para que absorban todo el líquido.
Cuece el pudding
Introduce en el horno y deja cocer unos 45 minutos hasta que esté hecho por dentro. Comprueba la cocción con una brocheta o palito de cocción; si sale seco estará en su punto, si no, prosigue durante unos minutos más.
Retira, desmolda y sirve
Retira y deja enfriar antes de desmoldarlo. Sírvelo partido en porciones, espolvoreadas con un poco de azúcar glas. Decora con frambuesas frescas o moras (te quedará precioso)
Mi última sugerencia es igual de deliciosa que este pudding, no te obligará a tener croissants y es muy posible que todos los ingredientes ya los tengas en casa. Es la receta estrella que guardarás como oro en paño: magdalenas caseras, la receta de la abuela fácil y tradicional (con vídeo).
No me digas que no es un placer despertarse, preparar tu bebida favorita y tener en la cocina (a buen recaudo porque, sino vuelan) unas buenas magdalenas. Mojar magdalenas en leche es uno de los momentos más felices (culinariamente hablando) que se pueden disfrutar por la mañana. ¿Eres amante de este momento?
Cocina Fácil / RBA / Emma García
Magdalenas caseras, la receta de la abuela
Para 4 personas
Ingredientes
- 200 gramos de harina de trigo
- 4 huevos
- 150 mililitros de aceite de oliva
- 170 gramos de azúcar (y un poco más para espolvorear)
- 1 limón
- 16 gramos de levadura química
- 1 pizca de sal
Paso a paso
Bate los huevos con el azúcar
Con unas varillas eléctricas (puedes usar unas manuales, solo tardarás un poquito más en integrar los ingredientes) bate los huevos con el azúcar hasta blanquear. Pon 12 cápsulas de papel o de silicona en un molde para magdalenas.
Añade el aceite en hilo
Sin dejar de batir, incorpora poco a poco el aceite en forma de hilo para que se vaya integrando con la mezcla de huevo.
Tamiza la harina con la levadura y la sal
Añade la harina, la levadura y la sal con un tamizador o colador para evitar que se formen grumos.
Añade la ralladura cítrica
Añade también a la mezcla la ralladura de la piel del limón, que habrás lavado previamente.
Deja reposar en la nevera y precalienta el horno
Reserva 40 minutos en el frigorífico para que la masa repose. Precalienta el horno a 220º con calor arriba y abajo.
Espolvorea con azúcar
Espolvorea sobre cada cápsula de magdalena un poco de azúcar para que se cree la costra crujiente en el horno.
Hornea y deja enfriar
Hornea 12-14 minutos o hasta que al pinchar con una brocheta, esta salga limpia. Retira las magdalenas del horno y déjalas templar sobre una rejilla de enfriamiento.
Estas son mis tres recetas para empezar el día de la mejor manera posible, recetas para mojar. ¿Te apuntas?