Esta receta cumple con todos los requisitos para convertirse en tu receta de cabecera para el desayuno del fin de semana: dulce, suave, saludable y muy ligera. Además, es una elaboración que incluye edulcorante en lugar de az��car y resulta más ligera.
Si no eres partidario de los edulcorantes artificiales, puedes elaborarla sin azúcar para aprovechar ese contenido tan dulzón de la manzana que, a mi parecer, ya resulta suficiente para darle el toque justo. Pero si eres muy goloso y necesitas un toque más dulce puedes incorporar miel a la receta en lugar del edulcorante o del azúcar. En este caso, cocinarías las tortitas sin azúcar y regarías ligeramente con miel en vez de adornarlas con azúcar glas. ¡Tienes varias opciones, tú eliges!
Lo mejor de la preparación es lo sencilla que resulta, que puedes prepararla con antelación y que no necesitas ingredientes especiales. Es muy posible que ahora que estás leyendo la receta, tengas en la nevera todos los ingredientes. En ese caso... ¡ya estás tardando!
El truco para unas tortitas más aireadas es mezclar los ingredientes suavemente hasta que te quede una crema fina con la que trabajar. Para no sobrebatir la masa, te recomiendo que, a la hora de desmenuzar e incorporar el queso, uses un tenedor en lugar de las barillas de la batidora (manuales o eléctricas).
También te recomiendo tamizar la harina con el colador más fino que tengas, ya que es la forma de asegurarte que la masa no tenga grumos y el resultado final en cuanto a la textura sea espectacular.
A la hora de elegir la variedad de manzana que vas a emplear en la receta, hazlo según tu paladar. Si prefieres un sabor más dulzón, opta por una manzana golden. Si, por el contrario quieres un toque dulce pero ligeramente más ácido, decántate por una manzana reineta o una granny smith.
Otras opciones para preparar tortitas fácilmente
Sugerencias extra para los amantes de las especias
Si quieres obtener un toque de sabor, la manzana combina perfectamente con la canela y queda absolutamente deliciosa. Si añades 1/4 de cucharadita a la mezcla, te quedará un sabor algo más dulzón (y probablemente ya no necesites ni miel ni azúcar glas y puedas decorar simplemente con frutas)
Si te atreves y soportas bien el ligero toque picante, te propongo un poquito menos de 1/4 de cucharadita de cardamomo, que si combinas con canela, te dará un sabor exquisito.