Las tartitas en formato individual van normalmente asociadas a recetas dulces , pero prepararlas en versión salada es una excelente opción para presentar un plato diferente y original. Su crujiente base de avena , su relleno de verduras y el gratinado del queso las convierten en un bocado de lujo. La base de avena de estas tartitas, sustituye a la tradicional masa quebrada o a las preparadas con galleta en las versiones dulces. Su textura final queda perfecta para extenderla en los moldes utilizando únicamente las manos. Prepararla es muy sencillo, la mitad de la avena se tritura para conseguir una especie de harina , de esta manera los ingredientes se integran mejor para formar la masa . Si este formato individual te ha gustado, puedes probar otras opciones, como estas tartitas de pasta brisa con jamón y puerro , estas tartaletas de pollo y tomate o estas tartaletas de calabacín . Y si eres amante del chocolate, no te las pierdas en formato postre y prueba estas tartitas de chocolate con mermelada y trufa . ¡Te van a encantar! Variantes para las tartitas de avena Puedes variar sin problema el tipo de verduras, quedará deliciosa la combinación cebolla y setas, de cebolla con pimientos, de calabacín y berenjena..., las posibilidades son infinitas. Prueba a añadir un poco de bacon crujiente a las verduras o incluir frutos secos como los piñones o frutas secas como las pasas. Un queso camembert o brie quedarán perfectos fundidos encima de las verduras, el sabor es increíble.