Da igual si es verano o invierno. Este postre frío, muy fácil de hacer , encaja perfectamente en cualquier época del año, ¡incluso en Navidad! Porque esta tarta de mousse de limón es refrescante y ligera al paladar, ideal para servir como postre tanto si hace calor como si hace frío. Prepararla es tan sencillo como hacer una gelatina de zumo de limón, mezclarla con nata montada y colocarla sobre una base de bizcochos de soletilla remojados en leche. Luego, bastará con llevarla a la nevera un mínimo de 5 horas y... ¡magia! El relleno habrá cogido consistencia y la tarta estará lista para servir. La verdad es que las tartas sin horno son un as en la manga cuando quieres preparar un postre con antelación y tenerlo listo en la nevera a punto para llevar a la mesa, ¿a que sí? En Cocina Fácil tenemos muchísimas tartas sin horno, y algunas también tienen el limón como ingrediente protagonista, como en esta tarta de mousse. Por ejemplo, el cheesecake o tarta de queso de limón , la tarta de queso y limón con sobaos o la tarta de limón con galletas . Cualquiera de estas tartas fáciles de limón se preparan sin necesidad de encender el horno y son un postre ideal para servir después de una comida o cena copiosa, por eso Nochebuena, Navidad y Fin de Año son épocas perfectas para prepararlas. Otras decoraciones para tu tarta de mousse de limón Si te ha sobrado nata, puedes montarla en el último momento y decorar la superficie de la mousse de limón con unos copetes de nata. También puedes conseguir un resultado similar con copetes de merengue en lugar de nata montada. Sustituye la piel de limón de la decoración por unas rodajas de limón escarchadas . Espolvorea la tarta de mousse con ralladura de coco, de chocolate o con unos nibs de cacao. También puedes decorarla con unas bolitas de chocolate. Otra opción es decorar la mousse con unos hilos de chocolate fundido. Solo tienes que trocearlo, ponerlo en un bol y derretirlo en el microondas, en intervalos de 5 segundos a máxima potencia. Tienes que ir poco a poco, en tandas de 5 segundos, porque una vez derretido, el chocolate se quema con facilidad. Cuando tengas el chocolate fundido, déjalo caer sobre la tarta de mousse de limón desde una cuchara, dibujando hilos sobre la superficie.