Tarta esponjosa de la abuela con bizcochos de soletilla y chocolate: el postre que te transportará a tu infancia

Tradicional y deliciosa, esta tarta es un viaje en el tiempo. Eso sí, en vez de galletas, hemos utilizado bizcochos de soletilla mojados en leche para prepararla, ¡una delicia!

Cristina Alvarez, directora de Cocina Fácil
Cristina Alvarez

Directora de Cocina Fácil y periodista especializada en gastronomía

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Cocina Fácil / RBA / IRENE REQUENA

Tarta esponjosa de la abuela con bizcochos de soletilla y chocolate
Cocina Fácil / RBA / IRENE REQUENA
4 personas

3

(11 votos)

Temporada:

Todo el año

Tipo Plato:

Postres

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

¿Cuándo piensas en la tarta de la abuela, qué ingredientes te vienen a la cabeza? Seguramente, chocolate, crema y galletas. Pues bien, hoy te presentamos una alternativa a la receta de toda la vida, sustituyendo las galletas por bizcochos de soletilla mojados en leche. ¡Riquísimo!

La tarta de la abuela con bizcocho que gusta a todo el mundo

No hace falta más que ver el resultado, ¿podrás resistirte a probarla? Por cierto, puedes utilizar las claras sobrantes de la receta para hacer otras elaboraciones, como un merengue, por ejemplo.

Este tipo de tartas caseras, que nos recuerdan a la cocina tradicional de las abuelas, son perfectas para cualquier ocasión. La combinación de los bizcochos de soletilla, la crema pastelera y el chocolate es irresistible, haciendo que este postre sea un éxito asegurado entre todos los públicos, tanto a mayores como a los más pequeños.

Una de las ventajas de esta receta es su sencillez. No necesitas ingredientes difíciles de conseguir ni técnicas avanzadas, por lo que es perfecta para quienes no tienen mucha experiencia en la cocina. Además, puedes prepararla con antelación y dejarla reposar en la nevera, lo que facilita mucho la organización de cualquier comida o celebración.

Ingredientes paraTarta esponjosa de la abuela con bizcochos de soletilla y chocolate: el postre que te transportará a tu infancia

  • Medio litro de leche
  • Una cucharadita de extracto de vainilla
  • 120 gramos de azúcar (separado en dos boles de 60 gramos)
  • 4 yemas de huevo
  • 40 gramos de harina fina de maíz
  • Para la crema
  • 100 gramos de chocolate
  • 100 mililitros de nata de montar o crema de leche
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1. Haz una masa

Pon la leche en un cazo, añade un bol de azúcar, remueve y agrega el extracto de vainilla. Infusionar. Coloca las yemas de huevo en un bol, agrega el resto de azúcar y mezcla. Añade la harina de maíz y mezcla de nuevo. Agrega la leche con la ayuda de un colador y bate bien con unas varillas.

2. Déjala reposar

Pon la mezcla de nuevo en el cazo y calienta a fuego medio, sin dejar de remover, hasta que veas que espesa (unos 10 minutos). Vierte la crema en otro recipiente y cúbrelo rozando el plástico con la crema para que no forme costras. Deja templar.

3. Prepara la base con bizcochos

Forra la base y los laterales de un molde alargado de unos 25 cm x 12 cm. Moja los bizcochos de soletilla con leche y los vas colocando como base, siempre boca abajo. Intenta que encajen, corta si es necesario.

4. Extiende la crema pastelera

Reparte la crema pastelera sobre los bizcochos hasta cubrir bien y pon otra capa de bizcochos. Vuelve a cubrir con una capa de crema y para terminar, otra capa de bizcochos. Déjalo en la nevera dos horas y desmolda en el plato.

5. La presentación

Pon la nata a calentar hasta que empiece a hervir, viértela sobre el chocolate y espera unos minutos. Bate hasta conseguir una crema homogénea y cubre toda la superficie de la tarta. Extiende bien y decora con un poco de nata montada y unas fresas.

Este tipo de tartas es perfecta para cualquier reunión familiar o fiesta infantil. Además de su sabor delicioso, tiene un aspecto tan apetecible que seguro sorprenderá a tus invitados. Con su toque de nostalgia y sus sabores tradicionales, es el postre ideal para cualquier ocasión especial.

La tarta esponjosa también cuenta con el punto a favor de que puedes personalizarla según tus gustos. Si buscas una versión más ligera, añadir menos azúcar, o incluso optar por un chocolate blanco en lugar de negro, para dar un toque diferente al sabor o puedes optar por utilizar leche desnatada o chocolate con menos contenido graso. Aun así, el sabor seguirá siendo delicioso, solo que un poco más suave.

Si te ha gustado esta receta tan original, te proponemos otras del repertorio de Cocina Fácil que te encantarán. Anímate a preparar nuestra tarta de moka de la abuela con bizcochos de soletilla, que además se prepara sin horno. Si no te acaba de gustar el toque de café en los postres, tienes que probar la tarta de la abuela de bizcochos de soletilla con queso crema, alucinarás con el resultado ¡queda supercremosa!

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