El encanto de esta tarta es conseguir que la crema quede muy suave y homogénea. Para conseguirlo, mientras se cuece al baño María, remueve suavemente con unas varillas. Así quedará perfecta. Respecto a la fruta, en nuestra receta hemos usado arándanos, pero también puedes decantarte por fresas, frambuesas, moras … Otras tartas exquisitas