Rollo frío de calabacín y queso crema, fácil y rápido, ideal para llevar en el táper

¿Buscas una opción refrescante y deliciosa? Prueba este tronco de calabacín relleno de queso crema, una receta nutritiva, sabrosa y fácil de preparar

ruth puig cocina facil
Ruth Puig

Periodista especializada en gastronomía

Rollo frío calabacín
4 personas

3

(2 votos)

Tipo Plato:

Primeros platos y entrantes

Precio:

Dificultad:

Cuando los calabacines del huerto están en su máximo esplendor, es hora de ser creativos en la cocina. Este rollo de calabacín es la solución perfecta para disfrutar de este vegetal de forma deliciosa. Combinado con queso crema, se convierte en un plato para toda la familia resultón y nutritivo, ¡e ideal para el verano!

Lo mejor de este plato es que no requiere mucho tiempo en la cocina. Se prepara con queso crema siguiendo unos pasos sencillos. Primero, se ralla un calabacín y se mezcla con huevos, sal, ajo en polvo y harina. Luego, se hornea la mezcla en una bandeja forrada con papel de horno. Después de hornear, se unta con queso crema, se enrolla y se deja enfriar. Ponte manos a la obra, ¡es muy fácil!

Esta receta es ideal para una reunión familiar o con amigos en la que tienes que preparar varios platos, ya que esta receta es recomendable prepararla con antelación para dejarla enfriar y que los ingredientes se integren bien. Ya sea para sorprender a tus amigos o para cenar rápido y ligero algún día que vas con prisas, este rollo de calabacín y queso crema es perfecto porque puedes dejarlo preparado y conservarlo en la nevera.

Ingredientes paraRollo frío de calabacín y queso crema, fácil y rápido, ideal para llevar en el táper

  • 700 gramos de calabacín
  • 4 huevos
  • 50 gramos de harina
  • 300 gramos de queso crema
  • 1 cucharadita de ajo en polvo
  • Pimienta negra
  • Sal
  • 1 manojo de hierbas aromáticas al gusto

1. Ralla el calabacín

Con la ayuda de un rallador, ralla un calabacín en trozos largos y delgados. Si la piel del calabacín es dura, es recomendable quitarla antes de rallarlo para obtener una textura suave.

2. Añade sal y deja reposar

Vierte el calabacín rallado en un recipiente y añade una pizca de sal. Mezcla bien para que la sal se distribuya uniformemente y deja reposar durante aproximadamente 5 minutos. Esto permitirá que el calabacín suelte parte de su agua.

3. Prepara la mezcla de huevos

En otro bol, casca 4 huevos y añade una pizca de sal, una cucharadita de ajo en polvo y pimienta negra molida. Bate los ingredientes enérgicamente hasta obtener una mezcla homogénea.

4. Mezcla el calabacín con los huevos

Escurre el calabacín que había estado reposando y agrégalo a la mezcla de huevos preparada anteriormente. Mezcla bien para que los ingredientes se integren y luego añade 50 gramos de harina, removiendo nuevamente para lograr una masa uniforme.

5. Corta otro calabacín en rodajas

Toma otro calabacín y córtalo en finas rodajas de aproximadamente 1 milímetro de grosor. Estas rodajas se utilizarán para cubrir la masa del tronco de calabacín.

6. Hornea y prepara el relleno de queso crema

Vierte la mezcla de calabacín y huevos en una bandeja rectangular forrada con papel de horno, asegurándote de distribuirlo de manera uniforme. Luego, coloca las rodajas de calabacín sobre la mezcla, superponiéndolas ligeramente. Hornea la preparación a 180 grados durante 20 a 30 minutos.

7. Pica las hierbas aromáticas

En un recipiente aparte, pica finamente hierbas aromáticas como eneldo y cebollino. Luego, añádelas al queso crema junto con un diente de ajo picado. Mezcla bien para obtener un relleno aromático.

8. Dale forma y sirve

Finalmente, retira con cuidado el papel de hornear de la masa horneada y unta generosamente con el queso crema aromatizado. Enrolla la masa formando un tronco redondo y envuélvelo nuevamente con el papel de hornear. Cierra los laterales y deja que se compacte durante unos minutos. Una vez listo, corta en porciones y sirve.

Te acabamos de presentar la receta perfecta para estas últimas semanas de calor, porque aunque sigue siendo un plato fresco, se puede adaptar a la perfección a cualquier época del año según de que lo rellenes.

Igual que los calabacines son muy versátiles, esta receta también lo es porque puedes dejar volar tu imaginación y añadirle o sustituir los ingredientes que quieras para darle un toque personal. Puedes optar por añadir muchas opciones diferentes a la receta antes de enrollar:

  • Incorporar proteína y hacer el rollo más completo poniendo en el interior del rollo jamón cocido o pavo o si prefieres que sea de pescado puedes poner salmón ahumado.
  • Añadir verduras para presentar una opción vegetariana incluyendo espinacas o champiñones.
  • Para darle un toque crujiente a la receta puedes seleccionar frutos secos como nueces picadas, avellanas o algunas semillas que puedan mejorar tanto el sabor como la textura de tu receta.
  • Preparar alguna salsa para acompañar tu rollo. Si te gusta innovar, puedes probar a complementar tu plato con una salsa de yogur que puede ser de muchos tipos diferentes.
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