Técnica usada desde tiempos remotos para conservar los alimentos, el escabeche sigue estando muy vigente en nuestras cocinas, a pesar de que hoy en día tenemos neveras y congeladores. Y es que los alimentos, una vez escabechados, quedan gustosos, aromáticos y con una textura que es una maravilla para el paladar. En los recetarios podemos encontrar muchísimas versiones: con pescados fuertes, como la sardina, el atún o la caballa , con carnes, como las perdices o el conejo , o con verduras. Pero, para algunas personas (entre las que me incluyo), el sabor del vinagre del escabeche resulta demasiado ácido, casi diría que agresivo para el paladar. No es el caso de esta receta, porque añadimos un ingrediente que contrarresta esa acidez. Es tan efectivo que pasaría el examen experto de cualquier abuela cocinera experimentada en la elaboración de escabeches: uvas pasas. Ahora te contamos cómo las añadimos. Muy sencillo de hacer, este escabeche de sardinas con zanahorias también lleva unas uvas pasas hidratadas en vino blanco que le aportan un toque dulce delicioso. Sírvelo tanto en un menú de diario como en una comida especial, si tienes invitados en casa, y todo el mundo quedará encantado. Los pasos fundamentales Una de las claves de esta receta es comprar una materia prima de calidad. Al adquirir las sardinas , fíjate que la piel sea de color plateado brillante (no debe verse opaca) y que tenga las agallas de color rojizo y los ojos claros y sin sangre. Respecto a la consistencia del cuerpo, tiene que ser firme. Una vez en casa, antes de usarlas, debes limpiarlas a conciencia . Sácales la cabeza y las vísceras y déjalas en un bol con hielo y agua, durante unos 30 minutos, para que suelten la sangre que puedan tener. En este punto, antes de colocarlas en el escabeche, sécalas bien, pásalas por harina y fríelas en aceite hasta que se doren por fuera y queden poco hechas por dentro . No es necesario tenerlas mucho tiempo en el fuego. Con un par de minutos será suficiente. Luego, déjalas escurrir sobre papel de cocina. Por lo que se refiere a la elaboración del escabeche, es supersencilla: simplemente tienes que rehogar la cebolla y las zanahorias en una sartén con aceite y, cuando la cebolla empiece a estar transparente, agregar los elementos ácidos y aromáticos. Cuando estén bien integrados, más o menos unos 8 minutos, incorpora las sardinas con cuidado que no se rompan (mejor utiliza unas pinzas de madera). Cocínalas un par de minutos a fuego muy lento y retíralas. Un apunte: aunque los escabeches se pueden servir recién hechos, calientes o templados, están más gustosos si han reposado durante 24 horas . Así que siempre es mejor hacerlos de un día para otro. Ideas y variantes para el escabeche de sardinas con zanahoria Nosotros hemos usado laurel como ingrediente aromatizante, pero también puedes agregar otras hierbas. Prueba con una ramita de tomillo o de romero . También puedes incorporar alguna verdura más, como el pimiento verde, el ajo o el calabacín , y sustituir la cebolla blanca por cebolleta. En este caso, córtala a lo largo y en tiras. Respecto al vinagre, si quieres conseguir un escabeche más fuerte y clásico, usa un vinagre de vino o de Jerez . En cambio, si lo prefieres más suave, decántate por uno de manzana o sidra .