Muy populares Almería, aunque también las encontramos en otras partes de Andalucía, como Jaén y Granada, las patatas en ajopollo son de esos guisos que saben a tradición, a esas recetas que han pasado de generación en generación hasta llegar a nuestros días y que, a pesar del paso de los años, siguen muy vivos en nuestras mesas. Curiosamente, a pesar de su nombre, este plato no incluye pollo en su elaboración. Solo lleva patatas y un majado a base de ajo, almendras y pan , fritos previamente, y azafrán , que le da color y sabor. Son solo 5 ingredientes, pero el resultado es de auténtico lujo. Si nunca has comido estas patatas, anímate a cocinarlas y ya nos contarás. Son tan sencillas de realizar y quedan tan sabrosas que seguro que se van a convertir en un clásico de tu recetario. Uno de sus secretos Uno de los pasos clave de esta receta, y que no debes saltarte, es en el momento de cortar las patatas. Para que queden perfectas, con una salsita supercremosa, es importante chascarlas . ¿Cómo? Muy fácil. Introduce el cuchillo en la patata, córtala un poquito y, luego, rompe la parte final con una ligera presión. Notarás un chasquido, señal que la has cortado bien. Con este gesto, la patata libera más almidón durante la cocción y el caldito quedará trabado o, lo que es lo mismo, con más consistencia. En el momento de cortar las patatas, procura que los pedazos no sean muy grandes o tardaran mucho en cocerse. Lo mejor es que sean trozos de bocado . Así, además, se harán al mismo tiempo. Un ejemplo típico son las patatas a la riojana . Para toda la familia Perfectas para incluir en los menús de diario, estas patatas están tan ricas que gustarán a todo el mundo, tanto a los más pequeños de la casa como a los adultos. Las puedes servir en cualquier época del año , pero como se toman bien calentitas, te irán de fábula en esos días en los que empiezan a bajar las temperaturas y apetece un plato que nos reconforte el cuerpo y el alma. Variantes y consejos para las patatas en ajopollo Puedes acompañar estas patatas con unas virutas de jamón o un poco de huevo duro rallado . También hay cocineros que cascan unos huevos dentro de la cazuela cuando faltan 10 minutos para terminar el guiso. De esta manera, se cocinan con el resto de ingredientes. Si no encuentras azafrán molido en las tiendas, puedes usar unas hebras de azafrán. En lugar de cubrir las patatas con agua, puedes utilizar un caldo de pollo o de pescado . De las dos maneras estarán riquísimas.