Los pasteles de carne siempre triunfan en las mesas, pero suelen tener un problema: se desmoronan un poco al servirlos. Para que esto no ocurra, procura dejarlos un tiempo en reposo para que se templen un poco. Así se asentarán y al cortarlos quedarán perfectos. Ten presente, además, que, tanto para cortar como para servir, lo ideal es usar una espátula ancha. Para que el pastel todavía quede más gustoso, marca las rodajas de tomate y, si tienes berenjenas en casa, no dudes en cortarlas en rodajas o láminas y ponerlas también. Antes, eso sí, pásalas por la plancha por las dos caras. Más ideas con carne picada