La Semana Santa está a la vuelta de la esquina y, cuando pensamos en un postre con el que saciar nuestro paladar y el de los invitados más exigentes esta temporada, no podemos pensar en otro que no sean las torrijas . La receta tradicional, ya sea bañada en leche o en vino, como hacen en algunos locales como Aparicio , en Málaga, se caracteriza por llevar pan duro , generalmente del día anterior, para conseguir ese acabado crujiente que caracteriza a este postre. Una textura que, sin embargo, en los últimos años ha evolucionado hacia un dulce mucho más esponjoso . Fue Martín Berasategui quien popularizó la idea de crear una torrija con pan brioche y, desde entonces, se ha consolidado como una de las favoritas de los amantes de la gastronomía vanguardista. Esta torrija, que también admite sus versiones con bollos suizos o de leche , se caracteriza por una gran cremosidad y por un sabor muy potente a mantequilla. Son infinidad los cocineros jóvenes que se han atrevido a reinterpretar esta receta de la gastronomía tradicional. El gallego Pablo Suárez , cocinero y creador de contenido, nos cuenta cómo prepara sus torrijas de brioche, un postre irresistible con el que triunfaremos esta Semana Santa. Las torrijas de Brioche de Pablo Suárez Pablo Suárez ( @poesiadefogon ) nos enseña su receta de torrijas de brioche. Un plato tradicional, con un sabor único y un toque moderno, una textura cremosa y un acabado irresistible al paladar. ¡Descubre como las hace! Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida de Poesía de fogón (@poesiadefogon) Torrijas de brioche Para 5 o 6 torrijas gruesas Ingredientes 300 ml de leche entera 300 ml de nata para cocinar 70 g de azúcar Una rama de canela Peladuras de naranja y limón Helado de vainilla para acompañar 60 g de azúcar y 40 g de mantequilla para el caramelo Paso a paso Infusiona la leche Vierte la leche y la nata en un recipiente y añádele todos los aromatizantes (las ralladuras de los cítricos, la canela y el azúcar). Déjala que caliente a fuego medio y, cuando esté a punto de hervir, retírala del fuego, dejándola reposar unos 30 minutos para que infusione bien. Emborracha las torrijas Corta el pan brioche en rodajas gruesas y colócalo en un recipiente, en cuya base debes haber echado la mitad de la mezcla. Cuando estén colocadas las rebanadas, báñalas con el resto de la mezcla, tápalas con un film y déjalas en remojo durante una o dos horas. Ten en cuenta que, cuanto más tiempo las dejes, más jugosas quedará, pero también serán más difíciles de manipular. Prepara el caramelo En una sartén, prepara el caramelo. Echa el azúcar, acompañado de un poco de agua, para evitar que se queme y, después, remuévelo con una cuchara a fuego medio-alto, hasta que empiece a fundirse. Déjala que vaya cogiendo un color tostado, pero sin quemarse y, cuando esté lista, retírala del fuego para evitar que se queme, añade la mantequilla y remueve hasta que se funda. Baña las torrijas Cuando tengamos la mezcla, bañaremos las torrijas, dejándolas unos segundos por cada lado para que el sabor se impregne bien, pero manipulándolas con cuidado para evitar que se rompan. El experto nos cuenta que, con cada sartén de caramelo, tendremos para bañar dos torrijas y que, si no tenemos práctica, puede que este paso se nos complique un poco Sírvelas Una vez que las tengamos, llega el turno de emplatar. Colócalas en tu plato preferido y acompáñalas con una bola de helado de tu sabor favorito. El cocinero nos recomienda decantarnos por un helado de vainilla, que encaja genial con la torrija, pero también podemos hacerlo por uno de turrón, de café... o uno cítrico, de mango o mandarina, si queremos darle un toque más fresco. Con esta torrija de brioche conseguiremos el postre más jugoso, esponjoso e irresistible con el que arrasar en Semana Santa.