¡Viva la cocina fácil! Y además creativa. Si te has cansado de hacer huevos rellenos con conservas de pescado y salsa de tomate, te recomendamos que pruebes nuestra sugerencia. Con muy pocos ingredientes y en muy poco tiempo harás un relleno de rechupete maridando dos ingredientes que son clásicos de nuestra despensa. También de nuestra cocina y de nuestros sándwiches y bocadillos: el queso y el jamón cocido. Los huevos rellenos de jamón y queso se pueden hacer con cualquier salsa mayonesa, pero si la haces casera y con una cucharada de mostaza, el bocado se convertirá en un bocado riquísimo. También te recomendamos que para cocinar la receta uses huevos talla XL , algo que te hará más fácil el relleno y alargará el momento de placer de todos los que los prueben. Reserva mayonesa para decorar el plato junto con unos trocitos de jamón cocido, cebollino muy picado o unas alcaparras . ¡Anímate!, y cocina los huevos rellenos de forma de diferente siguiendo nuestro paso a paso. Origen de los huevos rellenos Aunque no lo creas, los huevos rellenos tienen centenares de años. Se popularizaron ya en la Roma Imperial , cuando se condimentaban con salsas picantes y eran protagonistas de los entrantes de muchas veladas elegantes. Era habitual servir este plato mientras se entretenía a los invitado s. Se dice que los romanos tenían un dicho: "ab ova usque ad mala" , que significa en castellano "desde los huevos hasta las manzanas" , o desde el principio de una comida hasta el final. También hay información sobre su popularidad en Andalucía durante el al-Ándalus. En esta época, los musulmanes mezclaban las yemas con cilantro, el jugo de cebollas, pimienta, salsa de pescado, aceite y sal. Rellenaban las claras con la mezcla y unían ambas mitades con un palito, a modo de brocheta, y sazonaban. Poco a poco fueron extendiendo su éxito por toda Europa , rellenándolos con alimentos tradicionales de cada país, hasta hoy en día que siguen siendo uno de los entrantes más populares en cualquier velada. De hecho, muchos son los cocineros que les han dado una vuelta, empleando ingredientes como chutney, remolacha, caviar, wasabi o salmón ahumado, entre muchos otros.