No hay duda que las patatas quedan bien con todo : carnes, aves, pescados... Son guarnición, pero también aperitivo, ingrediente de ensaladas y platos tradicionales, como las clásicas patatas a la riojana . Cuando queremos preparar patatas para acompañar carnes y pescados, lo más habitual es cocinarlas fritas, asadas al horno o incluso transformadas en puré. Pero hoy, en Cocina Fácil, queremos darte una receta de patatas diferente . No están fritas pero quedan crujientes y tostaditas. No están asadas pero quedan muy jugosas en su interior. ¿Cómo se hacen, entonces? La elaboración tiene un truco maestro : hay que hacerlas en dos cocciones distintas. Primero tienes que cocerlas, bien sea a la manera tradicional, hirviéndolas en un cazo con agua salada durante 20 o 30 minutos en función del tamaño de los trozos, o bien en el microondas, que es la manera más rápida. Y después, cuando las patatas ya estén cocidas, solo te queda saltearlas unos minutos en la sartén, en una mezcla de mantequilla y aceite de oliva, hasta que se tuesten por fuera. El toque final, el sazonado, será el que dará a tus patatas tu sello personal. Aderezos para tus patatas de guarnición Ajo y perejil. Si te van los sabores tradicionales, añade ajo y perejil a la receta. Tienes varias maneras. Puedes picar el ajo y añadirlo a la sartén un minuto antes que las patatas. El perejil, pícalo y espolvorea las patatas en el último momento. También puedes preparar un aceite de ajo y perejil (tritura un ajo y un puñado de hojas de perejil con un par o tres de cucharadas de aceite) y rociar las patatas con este aceite justo antes de servirlas. Hierbas aromáticas. A las patatas les van bien todas las aromáticas: orégano, tomillo, romero, albahaca, hierbas provenzales... Elige la que más te guste o mezcla varias. Especias. Ajo y cebolla en polvo, pimentón dulce o picante, pimienta blanca o negra... Dales a tus patatas un sabor distinto cada vez. Otras recetas de patatas que te gustarán Tanto nuestra receta de patatas de hoy como estas otras que te proponemos son perfectas para servir como guarnición y también como platillo en el aperitivo, como alternativa a las clásicas patatas bravas de toda la vida.