Si eres amante del chocolate, seguramente te gustarán las cookies , el brownie , las trufas ... Pero de lo que no estamos tan seguros en Cocina Fácil es de que hayas oído hablar de esta receta. El Chocolate Chiffon Cake es uno de los pasteles más irresistibles y famosos del mundo. Su origen se remonta a Estados Unidos, cuando un vendedor de seguros llamado Harry Baker, que más tarde se convirtió en pastelero, creó esta maravilla en 1927. Curiosamente, la versión original no era de chocolate, sino de vainilla o cítricos. Aunque esa versión también es deliciosa, el chocolate le da un toque especial que lo lleva a otro nivel. Este pastel tiene una textura única: esponjoso como un bizcocho, pero húmedo como un pastel , logrando el equilibrio perfecto entre ambos. Su secreto está en la técnica de preparación, donde se montan las claras de huevo para darle ligereza y se hornea en un molde sin engrasar, lo que permite que crezca de manera uniforme. Si te animas a hacerlo, te recomendamos preparar de más, porque se conserva muy bien: hasta 3 días a temperatura ambiente , 10 días en la nevera y 2 meses en el congelador. Así, siempre tendrás un trozo listo para disfrutar. ¿Te atreves a probarlo? ¡Manos a la obra! ¡Prepáralo en casa! Para hacerlo, solo necesitas mezclar cacao con agua caliente y dejarlo enfriar. Luego, tamiza los ingredientes secos y bate las claras hasta que estén firmes. En otro bol, bate las yemas con azúcar, agrega el aceite, la vainilla y el cacao. Mezcla todo con suavidad, añade la harina tamizada y vierte la masa en un molde sin engrasar. Hornea y listo. ¿Fácil, verdad? Aquí tienes los ingredientes exactos y el paso a paso detallado para que te salga perfecto. Consejos para un resultado perfecto Aunque la receta es sencilla, hay algunos trucos que marcarán la diferencia para que tu Chiffon Cake quede como de pastelería. Si sigues estos consejos, todos te preguntarán dónde lo has comprado, aunque en realidad lo habrás hecho tú. ¡No se lo podrán creer! No engrases el molde para que la masa pueda agarrarse y crecer bien. Tamiza la harina varias veces para evitar grumos y lograr una textura más fina. Para un corte limpio, usa un cuchillo de sierra.