Antes, cuando preparaba una ensalada de patata , la hacía con atún, huevo duro, mayonesa... vamos, la ensalada de patata clásica, de toda la vida. Pero, aunque está muy buena, la verdad es que me cansé un poco y ahora la preparo con nuevos ingredientes. Ensalada de patata con tomate y queso ; con lechuga y zanahoria a la mostaza ; o la piamontesa, que lleva pepinillos y fiambre de jamón o de pavo . Pero, de todas las versiones de ensalada de patata que hago, mi preferida es la que te presento hoy: con langostinos y salsa pesto casera , ¡una combinación espectacular! Todos sabemos que parte del éxito de una receta es que entre por los ojos. Y es que si un plato tiene una presentación atractiva y apetitosa ya tiene mucho ganado entre los comensales. Las ensaladas (tanto si son ensaladas de invierno como de verano ) son perfectas para cumplir este objetivo. Podemos jugar con los ingredientes de distintos colores y texturas, realizar combinaciones de sabores muy originales… Solo hay que dejar volar nuestra creatividad. En nuestra ensalada de patata y langostinos de hoy, con muy pocos ingredientes y muy sencillos de encontrar en el mercado, conseguirás un plato rico y con una presentación espectacular. Además, esta ensalada tiene otro punto a su favor: puedes preparar los ingredientes con antelación y realizar el montaje justo en el momento de servir. Así podrás estar más tiempo con tus invitados. Si esta propuesta te ha gustado, no te pierdas la ensalada tropical de arroz con gambas, piña y curry , la ensalada de burrata con beicon y fruta o la ensalada de beicon, fresas y vinagreta . Protagonistas de la receta: las patatas cocidas A la hora de realizar esta receta, uno de los puntos que debes tener en cuenta, es la elección de las patatas. Escoge una variedad que, al cocerla, no se deshaga. Las más adecuadas son las variedades Monalisa o la Kennebec . Respecto a la cocción, hay varios consejos que debes tener en cuenta. Por un lado, es muy importante que tengan el mismo tamaño para que se cuezan en el mismo tiempo. También es conveniente no quitarles la piel ya que, así, conservarán todo su sabor y sus propiedades nutricionales. Luego, agrégales un buen pellizco de sal y déjalas cocer, a fuego medio, entre 20 y 40 minutos (dependiendo del tamaño de la patata). La mejor manera de comprobar si están cocidas, es pinchándolas con una brocheta o un palillo . Si este entra con suavidad en la carne, ya las puedes retirar. Una vez fuera del agua, déjalas templar , pélalas y córtalas en rodajas gruesas. Ya verás qué ricas. Ideas y variantes para la ensalada de patata y langostinos En lugar de la salsa pesto , puedes decantarte por una sabrosa vinagreta de mostaza y miel . Coloca el zumo de una naranja en un recipiente hermético, añade una cucharadita de miel, otra de mostaza, 3 de aceite de oliva, sal y pimienta y agita hasta que consigas una emulsión uniforme. Si te gustan los sabores en contraste, agrega unos daditos de manzana, de mango o de piña . Otras frutas que combinarán muy bien son las frambuesas, moras o los arándanos (frescos o deshidratados). Las hojas de col lombarda se pueden sustituir por lechuga o endivias . Y las colas de langostinos, por gambas o salmón ahumado cortado en tiritas. Antes de servir, incorpora algunos frutos secos picados por encima (nueces, almendras, avellanas…). También puedes optar por unas pipas de girasol , unas huevas de salmón y un poco de queso fresco desmenuzado .