Es impresionante el olor que desprenden estas magdalenas cuando se están horneando. Huelen a pueblo, a cocina de la abuela, a dulces caseros. Además, nuestras magdalenas de pueblo tienen una sorpresa en el interior: un toque de mermelada de fresa delicioso. Puedes emplear la mermelada que más te guste: frambuesa, frutos del bosque, naranja amarga... O, si lo prefieres, también puedes sustituir la mermelada por crema de cacao o dulce de leche. Si prefieres unas magdalenas sin relleno , no te pierdas nuestra videorreceta: ¿Cómo conseguir que las magdalenas no pierdan la forma durante la cocción? Para evitar que las magdalenas pierdan la forma durante la cocción y mantengan su aspecto esponjoso y redondeado, aquí hay algunos consejos que puedes seguir: Reposo de la masa: después de mezclar todos los ingredientes de la masa de las magdalenas, deja reposar la masa en el refrigerador durante al menos 30 minutos antes de hornearlas. Este reposo ayuda a que la masa se hidrate adecuadamente y permite que los ingredientes se integren, lo que favorece la formación de una textura más consistente durante la cocción. No mezclar en exceso: al combinar los ingredientes secos con los líquidos, evita mezclar en exceso. Un ligero batido o mezcla con movimientos envolventes será suficiente para lograr una masa homogénea. El sobrebatido puede desarrollar el gluten en exceso y resultar en magdalenas más densas y con menos forma. Utiliza moldes adecuados: utiliza moldes de papel para magdalenas de buena calidad o moldes de silicona antiadherentes. Los moldes de papel te ayudarán a mantener la forma redondeada y evitarán que la masa se expanda hacia los lados durante la cocción. Precalienta el horno: asegúrate de que el horno esté bien precalentado antes de colocar las magdalenas en él. Esto permite que la masa comience a cocinarse rápidamente y establezca su forma desde el principio. No llenes demasiado los moldes: llena los moldes de las magdalenas solo hasta aproximadamente dos tercios de su capacidad. Si los llenas en exceso, es más probable que se desborden y pierdan su forma característica. Horno a temperatura adecuada: ajusta la temperatura del horno según la receta y mantén un seguimiento cercano de las magdalenas mientras se cocinan. Un horno demasiado caliente puede hacer que las magdalenas se expandan rápidamente y luego colapsen. Hornea a temperatura constante: evita abrir la puerta del horno durante los primeros minutos de cocción, ya que puede provocar cambios bruscos de temperatura que afecten la formación adecuada de las magdalenas. Utiliza agentes leudantes frescos: asegúrate de utilizar levadura química (polvo de hornear) y bicarbonato de sodio frescos para obtener un buen levantamiento y esponjosidad en las magdalenas.