Los dips son ese pequeño capricho que todos nos permitimos de vez en cuando , pero este en particular tiene ese aire sofisticado que te transporta a las costas del Norte de Europa, donde el salmón es el rey. Con la frescura del queso y el aroma del eneldo, te sentirás igual que en una cabaña escandinava, disfrutando de una tarde frente al mar. ¿Te apetece un bocado de esas tierras frías, pero desde la comodidad de tu salón? Pues no pierdas detalle, esta receta es tu aliado perfecto. Además, no estamos hablando de cualquier cosa. Queso fresco y salmón ahumado, dos ingredientes que no solo están llenos de sabor, sino que también son superalimentos para nuestro cuerpo . El salmón te aporta ácidos grasos omega-3, ideales para cuidar el corazón, y el queso fresco es ligero y lleno de proteínas. Este es uno de esos dips que no te hacen sentir culpable después de comerte media fuente, porque además de delicioso, contribuye a tu bienestar. Lo mejor de todo es que, aunque tiene un sabor increíble y parece un plato de chef , este dip es facilísimo de hacer, superfácil de preparar y listo en minutos. En un ratito lo tienes listo, así que es perfecto para cuando llegan invitados inesperados o simplemente para disfrutar tú solo en el sofá. Puedes prepararlo con antelación y tenerlo en la nevera listo para cuando quieras disfrutar de una velada tranquila o una fiesta informal. Si ya te has enamorado de este dip, te reto a que experimentes un poco. Puedes cambiar el queso fresco por una versión de queso crema más suave, o incluso añadir unos pistachos molidos por encima. Los pistachos son mi acabado preferido, le darán un toque crujiente e irresistible, y el contraste de color hará el plato, si cabe, todavía más elegante. Si lo que estás buscando es una variante más saludable, tampoco hay problema, prueba a sustituir el yogur por uno bajo en grasa. A día de hoy en todos los supermercados podemos encontrarnos yogures con un contenido en grasa bajísimo que suelen denominarse 0.0, o incluso por una crema de queso ligera y rebajada con leche desnatada. En cuanto a la presentación, yo diría que, en este caso, depende mucho de los comensales que tengas en mente agasajar. Este dip es perfecto tanto para una cena informal con amigos, tanto como para algo más elegante . Si tienes una reunión más festiva, te recomiendo presentarlo en cuencos pequeños con crudités de colores vivos, como zanahorias baby, láminas de encurtidos o tiras de pepino. Si, por el contrario, vas a lo informal, unas buenas tostadas de pan rústico supercrujientes nunca fallan. Tomes la decisión que tomes este plato será el centro de atención en cualquier mesa. Así que ya sabes, este dip de queso fresco y salmón ahumado es perfecto para cualquier ocasión, no es solo un plato delicioso, sino una verdadera joya culinaria que puedes preparar en casa en cualquier ocasión . Ideal para cenas informales, comidas con amigos o incluso como entrante en una comida más formal. No esperes más para probarlo. Sorprende a tus invitados, te lo van a agradecer seguro.