Conejo al ajillo, la receta de la abuela con sabor a pueblo

Este guiso tradicional de conejo es uno de los clásicos de nuestra gastronomía, y hoy en Cocina Fácil te enseñamos cómo prepararlo para que tenga todo el sabor de siempre... en poco más de media hora

Óscar Sanz
Óscar Sanz
Cocinero

Cargando vídeo: Conejo al ajillo

Conejo al ajillo
4 personas
35 min

3

(85 votos)

Dieta:

Mediterránea

Temporada:

Todo el año

Tipo Plato:

Segundos platos y platos principales

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

No sabes lo sabroso que queda este guiso facilísimo de conejo, que preparamos siguiendo la receta clásica de la abuela. Es un plato fácil y muy ligero, porque la carne de conejo es una de las menos calóricas que existen, con aproximadamente 130-140 kilocalorías por cada 100 gramos.

El conejo es una gran fuente de proteínas de alta calidad y es una carne de fácil digestión, así que es una alternativa perfecta al pollo o al cerdo, por ejemplo, que es importante añadir a nuestra dieta al menos una vez a la semana. Y, cocinado así, queda realmente jugoso y con mucho sabor.

Para conseguir un sabor como el de la abuela, es básico elaborar una picada o majado en el mortero. Seguramente, es el paso más laborioso de la receta pero también es imprescindible: hay que majar los ajos con el pimiento choricero, las almendras y el perejil y luego añadir un poquito de vino blanco para darle una textura más líquida y poder bañar con esta mezcla el conejo.

Para hacer el majado puedes sustituir las almendras por avellanas, y también hay quien añade un poco de pan tostado, para darle una textura más rústica y ganar sabor. Importante: el majado lleva vino blanco, así que es importante dejarlo luego cocinar para que el alcohol se evapore.

Ingredientes paraConejo al ajillo, la receta de la abuela con sabor a pueblo

  • 1 Conejo mediano
  • 6 Dientes De Ajo
  • 2 rebanadas de Pan seco
  • 1 Pimiento Choricero
  • 12 Almendras
  • 1 copa de Vino Blanco
  • 1 ramita de Perejil
  • Aceite De Oliva
  • Sal
  • Pimienta

1. Limpia el conejo

Corta el conejo en pedazos pequeños, con un cuchillo de cocina bien afilado y lávalo bien bajo el grifo del agua para eliminar los posibles restos de sangre. Ponlo en un colador, para retirar el exceso de agua y ve lavando los trozos, uno a uno, con papel absorbente de cocina. Una vez tengas el conejo seco, salpimiéntalo y resérvalo hasta el momento de usarlo en la receta.

1. Limpia el conejo

2. Dora los ajos

Pon al fuego una cazuela y agrega 4 o 5 cucharadas de aceite de oliva. Enciende el fuego a temperatura media y cuando esté caliente, añade los ajos enteros y sin pelar. Dóralos a fuego medio durante unos 3 o 4 minutos aproximadamente y, después, retíralos del fuego. Si quieres, puedes añadir también un par de hojas de laurel a la cazuela.

2. Dora los ajos

3. Agrega pimiento choricero

Después de haber retirado los ajos, agrega a la cazuela el pimiento choricero, troeado. Saltéalo durante un minuto y luego retíralo de la cazuela, con una espumadera. Resérvalo junto a los ajos.

3. Agrega pimiento choricero

4. Sofríe el conejo

En el mismo aceite en el que has dorado los ajos y el pimiento choricero, añade el conejo troceado y sofríelo por todos lados hasta que esté bien dorado, necesitarás unos 8 minutos aproximadamente. Es importante que todos los trozos de carne se cocinen por igual, así que es posible que tengas que cocinar el conejo en varias tandas.

5. Haz una picada en el mortero

Mientras el conejo se sofríe, aprovecha para preparar la picada o majado. Primero, pela los ajos que tenías reservados (los que has dorado al principio de la receta) y colócalos en el mortero junto a las almendras y el perejil. Abre el pimiento choricero que también tenías reservado, retira las semillas, trocéalo y colócalo en el mortero. Pica todo con la mano de mortero, hasta obtener una picada o majado bien fino. Vierte el vino en el mortero, remueve para mezclar bien con la picada y vierte la mezcla resultante sobre el conejo. 

5. Haz una picada en el mortero

6. Deja reposar

Cocina todo junto durante unos 5 minutos, ahora a fuego lento, y removiendo de vez en cuando. Pasado este tiempo, apaga el fuego, tapa la cazuela y deja reposar el guiso una media hora antes de servirlo, para que los sabores se asienten bien. Cuanto más tiempo dejes reposar el conejo, más sabroso te quedará el ajillo.

El truco

Para que la carne de conejo te quede muy melosa, es fundamental que la cocines siempre a fuego lento.

Con qué acompañar el conejo al ajillo

Consejos para hacer un conejo al ajillo tierno y sabroso

  • Lo primero es limpiar bien el conejo para que no queden rastros de sangre y secarlo con papel absorbente. Si tienes tiempo, muchos cocineros lo que hacen es blanquear la carne, sumergiéndola durante unos 30 minutos en agua salada. Este proceso, además de conseguir que la carne quede más tierna, ya la sala, así que luego solo tendrás que espolvorearla con pimienta.
  • Cuando dores el conejo, no te excedas con el tiempo o quedaría muy seco. Con 8 minutos entre los dos lados hay suficiente. Luego, ya se acaba de guisar con el majado de ajo, pimiento choricero y vino.
  • Si quieres que el conejo tenga un poco de salsa, puedes agregar medio vasito de caldo de pollo o de verduras a la cazuela (justo después de haber incorporado el majado).
  • Procura que la picada te quede muy fina y mézclala con el conejo para guisar todo junto 5 minutos más.
  • Cuanto más tiempo dejas reposar ese plato, más tierno y jugoso queda.

Más recetas deliciosas de conejo:

No lo dudes y prepara un plato de conejo (al menos) cada semana. Está delicioso y gustará a toda la familia.

¿Has preparado esta receta?

Marcar como cocinada

Notas de cocina

Comparte las notas de tu cocinado con otros usuarios o envía un mensaje privado

Mis notas
Las más útiles
Todas

¿Te ha gustado esta receta?

Puedes guardarla en tus favoritos, imprimirla o compartirla