El rape podemos prepararlo de muchísimas formas, pero una de nuestras favoritas es tal y como lo hemos cocinado hoy: horneado sobre un lecho de hortalizas asadas, bañado simplemente con un poco de vino y una salsa verde con perejil. No hay ningún misterio, solo controlar el tiempo de horneado, que dependerá del tamaño del pescado y también del grosor de las hortalizas. Puedes usar pescado fresco o congelado, solo asegúrate –en el caso de que optes por el congelado– de descongelarlo de un día para otro en el frigorífico y de dejar que suelte toda su agua antes de hornear para que quede perfecto. Otras formas deliciosas de cocinar el rape son: en cazuelitas con langostinos , en el relleno de unos canelones o cocinado con almejas y salsa de espárragos .