Brochetas de pollo bang bang: un plato intenso, cremoso e irresistible

Carne de pollo fresca, un buen marinado y una salsa potente: son el secreto de las brochetas de pollo bang bang, que se convertirán en uno de los platos estrella de tus menús.

Marta Sánchez
Marta S. Galindez

Periodista especializada en gastronomía

Brochetas de pollo Bang Bang iStock 1640179712
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5

(1 voto)

Temporada:

Todo el año

Técnica:

Asado (parrilla/barbacoa)

Tipo Plato:

Primeros platos y entrantes

Precio:

€ €

Dificultad:

Fácil

¿Habías oído hablar de las brochetas de pollo bang bang? Este divertido nombre se debe a la salsa que acompaña al plato, un clásico tailandés que triunfa en todo el mundo. El pollo marinado y tierno y el toque de parilla hacen el resto, dando lugar a un plato delicioso que traerá nuevos sabores a tu mesa.

Perfecta para una cena diferente o para comer, con una ensalada verde y fresca, esta receta es tan sencilla de preparar como deliciosa. Anímate y pruébala hoy mismo: os volveréis fans de ella. ¡Un éxito seguro!

Ingredientes paraBrochetas de pollo bang bang: un plato intenso, cremoso e irresistible

  • 500 g de pechuga de pollo troceada
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 2 dientes de ajo
  • 2 cucharaditas de jengibre rallado
  • 1 cucharadita de pimentón
  • 1 cucharadita de comino
  • Sal
  • Pimienta negra
  • Para la salsa
  • 1/2 taza de mayonesa
  • 60 ml de salsa de chile dulce
  • 2 cucharadas de salsa sriracha
  • 1 cucharada de miel
  • 1 limón
  • Cebollino picado

1. Marina el pollo

En un bol grande, mezcla el aceite, las especias, el jengibre, el ajo bien picado, la sal y la pimienta. Introduce los trozos de pollo y muévelos con las manos limpias, hasta que se impregnen bien del marinado. Cierra el bol con film transparente y déjalo en la nevera durante por lo menos 30 minutos.

2. Haz la salsa bang bang

Mientras la carne se marina, coge un bol mediano y vierte la mayonesa. Un consejo: si quieres aligerar la salsa y hacerla más suave, en lugar de mayonesa puedes utilizar un yogur sin azúcar, normal o griego. Exprime el limón y añade el zumo junto con la salsa sriracha, la salsa de chile dulce y la miel. Prueba la salsa  y rectifica de sal, si es necesario; y si la quieres más picante, añade un poco más de sriracha.

3. Monta las brochetas

Si vas a usar palos de brocheta de madera, remójalos durante 20 minutos para que no se quemen en la parrilla. Coloca los trozos de pollo marinado dejando unos milímetros de separación entre ellos para que se cocinen bien por todas partes. Si quieres, puedes intercalar rodajas de calabacín, trozos de pimiento rojo, champiñón, piña...

4. Asa las brochetas

Pon la parrilla al fuego (o enciéndela si es eléctrica) y caliéntala bien. Pincélala con un poco de aceite y pon las brochetas encima. Ásalas durante 15 minutos, dándoles la vuelta de vez en cuando para que se doren de manera uniforme. Para saber si están hechas, corta uno de los trozos: si el interior está hecho pero aún jugoso, sácalas y ponlas en un plato.

5. Presenta el plato

Puedes colocar las brochetas en una fuente y la salsa aparte, en una salsera.  Si quieres servirlas directamente en los platos, imprégnalas bien con la salsa (como en la foto) por todas partes y espolvorea por encima cebollino picado. Sírvelas calentitas, ¡y a comer!

El truco

Si utilizas muslos de pollo deshuesados y troceados, las brochetas quedarán mucho más jugosas. ¡Pruébalo!

Estas brochetas de pollo bang bang son solo un ejemplo de lo que puedes hacer con esta rica salsa. También esta buenísima con alitas al horno, con calamares a la romana, con champiñones frescos o tofu para una dieta vegetariana... El secreto está en la cremosidad que aporta la mayonesa o el yogur (según lo que hayas elegido para prepararla), el toque justo de picante que lleva y el punto agridulce que le dan la miel y el limón. ¡Un festival de sensaciones!

El término "bang bang" procede de la cocina china, concretamente de la región de Sichuan. Al parecer, se refiere a un tipo de preparación en el que hay que golpear el pollo para ablandarlo antes de cocinarlo: de ahí la onomatopeya.

Sin embargo, la salsa no tiene nada que ver con esa receta; aunque es muy posible que se haya utilizado para acompañarla. Su origen está en la cadena de restaurantes norteamericana Bonefish Grill, con sede en Florida, donde se creó por primera vez.

Las brochetas, con salsa o sin ella, son un plato estrella para cualquier cena, comida informal o barbacoa con los amigos. No te quedes solo con esta receta y experimenta también con unas brochetas de ternera marinada, unas brochetas de champiñones y verduras con pesto y unas brochetas de kiwi y piña a la plancha con salsa de lima. ¡Un menú para todos los gustos!

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