Si eres fan de los bizcochos de la abuela y tampoco puedes resistirte al sabor del chocolate, hoy en Cocina Fácil tenemos el postre perfecto para ti: un bizcocho superesponjoso y muy jugoso... ¡con doble chocolate! Y es que el chocolate se añade al bizcocho de dos maneras distintas : primero, como un ingrediente más de la masa, en forma de cacao en polvo puro (o amargo). Y luego, en la cobertura con la que decoramos el bizcocho, un glaseado de chocolate con efecto espejo que es muy fácil de hacer pero que consigue que ¡parezca salido del escaparate de la mejor pastelería! También es verdad que ese aspecto tan profesional se debe a un detalle de lo más sencillo: el molde que hemos empleado para hornearlo. Es un molde bundt cake , un tipo de molde creado por la marca alemana Nordic Ware pero que hoy en día puedes encontrar sin problema en cualquier tienda especializada en artículos de pastelería (o también por Internet). El original es metálico, pero los hay de otros materiales como la silicona. La característica principal de los moldes tipo bundt cake es que, además de tener formas decorativas que otorgan a los bizcochos una estética y un acabado precioso (con detalles geométricos, ondas y ranuras... hay muchos diseños distintos), tienen un hueco central con una misión importante: ese hueco permite que la cocción del bizcocho sea más uniforme , ya que el calor se distribuye mejor y se evita que el centro quede crudo. ¿A que te ha pasado más de una vez que, al hacer un bizcocho grande, se cuece más rápido por los bordes mientras que el centro queda un poco crudo? Pues eso lo puedes evitar utilizando un molde tipo bundt cake o corona, con ese hueco central. Eso sí, es importante que engrases bien el molde antes de añadir la masa del bizcocho, para que no se pegue, y que, una vez horneado, te esperes a que esté del todo frío para desmoldarlo con mucho cuidado. Si te gusta encontrar tropezones, puedes añadir unas nueces picadas a la masa del bizcocho, un ingrediente básico en otra de las recetas de bizcocho de chocolate más famosas del mundo: el brownie . Las nueces que se utilizan para hacer un brownie son las de California, pero puedes emplear nueces pecanas o de Macadamia si lo prefieres, y también probar con otros frutos secos, como almendras o avellanas. Eso sí, enharina los frutos secos antes de incorporarlos a la masa para que no se vayan todos al fondo. Otros bizcochos de chocolate deliciosos de Cocina Fácil