Antes no me atrevía, ahora lo hago una vez a la semana: pan casero fácil (de calabaza)

Más que ingredientes, lo que realmente necesitas para elaborar este pan es tiempo de reposo para que la fermentación haga su magia.

Isabel Zuñiga
Isabel Zúñiga

Redactora especializada en recetas de cocina

Pan de calabaza
Istock

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Dieta:

Mediterránea

Temporada:

Todo el año

Técnica:

Horno

Tipo Plato:

Acompañamientos

Precio:

€ €

Dificultad:

Media

Cuando empezamos a aventurarnos en el mundo de la cocina, solemos ir incrementando el nivel de dificultad de las recetas. Resulta curioso que no acabemos de atrevernos a hacer una tan básica como es el pan. Puede ser que nos dé algo de respeto, ya que hay factores como la temperatura y la humedad ambiental que influyen a la hora de fermentar la masa, pero en realidad cualquier persona puede lanzarse a hacer pan en casa.

En tu mano está hacer un tradicional pan casero o directamente apostar por una opción más atrevida como es el pan de calabaza. Para elaborarlo necesitarás harina de fuerza, una harina con mayor contenido de gluten para darle a la miga esa textura aireada tan característica. 

Es cierto que la calabaza no es un alimento fácil, ya que no a todo el mundo le gusta ese toque dulce al final, pero sí que encaja muy bien con el pan, aportándole un sabor muy curioso. En el paso a paso que encontrarás a continuación te contamos cómo asar y triturar la calabaza para hacer el puré. Si ya lo tienes hecho, ganarás un tiempo precioso, puesto que las recetas de pan implican bastante tiempo de reposo por el tema de las fermentaciones.

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Ingredientes paraAntes no me atrevía, ahora lo hago una vez a la semana: pan casero fácil (de calabaza)

  • 300 gramos de calabaza
  • 550 gramos de harina de fuerza
  • 10 gramos de levadura seca
  • 450 mililitros de agua tibia
  • 2 cucharaditas de sal
  • Romero picado
  • Tomillo picado
  • 2 cucharadas de semillas de sésamo
  • Pipas de calabaza

1. Asa la calabaza

En el supermercado la encontrarás ya pelada, cortada y envasada al vacío, así que solo tendrás que cortarla en trozos más pequeños y de igual tamaño para que tarde menos en asarse y lo haga de forma homogénea. Hornéala en el horno precalentado a 180 ºC unos 20 minutos. Cuélala para evitar el exceso de líquido que haya podido soltar y tritúrala para obtener un puré fino. 

2. Prepara la masa

Mezcla en un bol el agua con la levadura. Deja que repose unos instantes e incorpora la calabaza. Mezcla bien y agrega la sal, el tomillo, el orégano, 1 cucharada de semillas de sésamo y la harina. Vuelve a mezclar, tápalo y deja levar 2 horas y media en una zona cálida y oscura.

3. Deja reposar

Enharina la superficie de trabajo para evitar que se pegue la masa y trabájala dándole forma de hogaza. Espolvorea harina, colócala en un bol grande con un trapo de algodón y deja reposar 20 minutos.

4. Agrega las semillas y hornea

Precalienta el horno a 220 ºC con una cacerola de hierro fundido dentro. Dale la vuelta al pan y reparte las semillas y las pipas por la superficie. Pon el pan dentro de la cacerola ligeramente enharinada, presiónalo ligeramente con los dedos de tal manera que queden marcados, tapa y hornea 25 minutos.

5. Vuelve a hornear

Baja la temperatura a 200 ºC y retira la tapa. Pon un recipiente con 200 mililitros de agua en la parte inferior del horno y hornea media hora. Saca el pan del horno y deja que se enfríe sobre una rejilla. Corta en rodajas y combina con lo que más te apetezca.

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