No solo españolas: las torrijas conquistan el mundo y así las preparan en otros países

Francia, Portugal, Irlanda, Inglaterra y Canadá tienen recetas tradicionales que se parecen mucho a las torrijas españolas, ¿Quieres descubrir cómo las hacen?

Cristina Alvarez, directora de Cocina Fácil
Cristina Alvarez

Directora de Cocina Fácil y periodista especializada en gastronomía

Torrijas internacionales
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Las torrijas son, sin duda, uno de los dulces estrella de nuestra Semana Santa. Han estado siempre presentes en nuestras cocinas pero, últimamente, han vuelto a ponerse de moda, también, en las cartas de los restaurantes.

No es de extrañar que este sencillo y exquisito postre haya renacido: es muy fácil de elaborar, se utilizan ingredientes que todos tenemos en nuestra despensa y la explosión de sabores que provoca al comerlo es sensacional.

De hecho podemos afirmar, sin temor a equivocarnos, que es uno de los buques insignia de nuestra gastronomía. Pero las torrijas no solo se degustan y preparan en las cocinas españolas. Existen versiones muy similares de esta mezcla de pan duro y leche aromatizada en otros países, tanto vecinos como lejanos.

Hemos recopilado para ti algunas de ellas. Anímate a prepararlas y a probar, también, las "otras" torrijas.

1. Portugal: fatias parida

Fatias parida
Cocina Fácil / RBA / EMMA GARCÍA

Esta receta es muy parecida a la de nuestras tradicionales torrijas. Quizá la principal diferencia está en el tipo de pan que se usa: las fatias parida, conocidas también como fatias douradas, utilizan pan de hogaza, y no de barra como solemos hacer en España.

Otra es que, para elaborarlas, además, no se suele usar ralladura de naranja (tan solo de limón), como sí hace la receta española.

Una buena idea es tomarlas en el desayuno esos días en los que creas que necesitas energía extra. De hecho, su nombre le viene de esta virtud, porque se solían dar a las mujeres que acababan de parir para reponer fuerzas.

2. Francia: pain perdu

Pain perdu
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El pain perdu francés es otro buen ejemplo de cocina de aprovechamiento y de cómo las tradiciones gastronómicas beben unas de otras, adaptándolas a sus costumbres y a sus particulares maneras de cocinar.

En el caso de estas "torrijas" francesas, lo que se suele hacer es dorarlas con mantequilla derretida en vez de freírlas en aceite. Tampoco es habitual usar canela ni ralladura de cítricos. El pan también es diferente porque prepararlas con rebanadas de molde es bastante común.

Pero quedan igualmente exquisitas, sobre todo cuando se les añade un poco de azúcar justo antes de pasarlas por la plancha, porque les da un toque caramelizado que es irresistible.

3. Irlanda: torrijas al Baileys

Torrijas a la irlandesa
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Esta propuesta tan golosa puede convertirse en un postre para ocasiones especiales si acompañas las torrijas al Baileys con una arena de galleta coronada con una bola o quenelle de helado de vainilla.

El secreto está en mezclar el Baileys y la leche a partes iguales, y aromatizarla con naranja y canela. Y para que luego el pan (en este caso, de tipo brioche) absorba mejor los sabores debes dejar reposar la mezcla antes y también después, tras empaparlo bien en ella.

Si no tienes Baileys en casa, puedes cambiarlo por otro tipo de licor que sea similar, como por ejemplo el de crema de arroz.

4. Canadá: pain doré

Torrijas de Canadá
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El pain doré es una estupenda opción para cocinar con niños durante Semana Santa. Esta versión canadiense de las torrijas es muy rápida de preparar, porque la leche se aromatiza en frío, sin necesidad de calentarla.

Para elaborarlo, tan solo necesitas pan de molde, leche, huevos, canela, vainilla, una pizca de sal... y sirope de arce, muy usado en Canadá, que sustituye a nuestra tradicional miel.

5. Inglaterra: torrijas con crema inglesa y crumble

Torrijas a la inglesa
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Puedes darle un toque británico a tus torrijas de siempre si, una vez elaboradas, las bañas con un poco de crema inglesa y las acompañas de helado servido sobre una base de crumble.

Pero, para que esta versión sea aún más british, te proponemos cambiar el pan de barra por uno de tipo brioche, y la miel por sirope de arce, como hemos hecho en la anterior receta.

Sirve esta propuesta como colofón de una comida de fiesta y verás cómo triunfas seguro.