Con este recipiente de Ikea puedo cocinar al horno o en la airfryer, puedo servir en la mesa y también me sirve como tupper, ¡y vale menos de 3€!)

Un recipiente que lo hace todo: hornea, calienta, guarda y sirve… ¡y por menos de 3€! Descubre por qué se ha vuelto imprescindible en mi cocina.

ruth puig cocina facil
Ruth Puig

Periodista especializada en gastronomía

Ikea
Ikea

¿Alguna vez has comprado algo sin pensarlo mucho y luego se ha vuelto imprescindible? Eso me pasó con este recipiente de vidrio para horno de Ikea. Lo vi, me pareció una ganga (menos de 3€) y me lo llevé. Forma parte de la colección 365+ de Ikea y ahora no sé cómo he podido vivir sin él. ¡Es una maravilla!

Ya lo he probado para cocinar varias de mis recetas favoritas, como los macarrones al horno gratinados con dos quesos, los puerros gratinados con jamón y queso, las alcachofas al horno o las patatas al horno con hierbas aromáticas y especias, que me encantan.

Un recipiente multifuncional

Lo mejor de este recipiente es lo práctico que es. Me sirve para cocinar y también para guardar comida. Si alguna vez has tenido que cambiar de recipiente mientras cocinas, sabes lo molesto que es. Con este, no hace falta que te compliques: puedes hornear, guardar y servir en el mismo.

Está hecho de cristal, lo que tiene muchas ventajas. No absorbe olores, así que puedo usarlo con cualquier alimento, como curry o salsa de tomate, sin que queden rastros de sabor. Además, al ser transparente, puedo ver su contenido sin necesidad de abrirlo, ahorrando tiempo al buscar comida.

Fácil de limpiar y muy práctico

Limpiarlo es superfácil. A diferencia de otros recipientes, no se queda manchado de salsas o aceites. Solo lo limpio con un paño húmedo y queda perfecto. Pero si lo necesitas, también puedes meterlo al lavavajillas, así que no hay excusa para no usarlo.

Este recipiente también es apto para microondas, congelador y horno, lo que lo hace aún más práctico. Puedo usarlo para cocinar platos en el horno, calentar comida en el microondas o meterlo en el congelador para conservar las sobras. ¡Es muy versátil!

Ideal para servir y almacenar

Pero de todas sus características, la que más me gusta sin duda es que este recipiente es ideal para servir directamente en la mesa. Ya no tengo que pasar la comida de un recipiente a otro cuando tengo invitados. Además, como es de vidrio, le da un toque elegante a la mesa. 

El otro día tuve invitados y preparé un delicioso gratinado de patatas y queso, que serví directamente en este recipiente. ¿Quieres la receta? Te la comparto a continuación para que veas lo práctico que es: puedes cocinar en él y llevarlo a la mesa sin necesidad de cambiar de recipiente. ¡Ideal para recetas al horno!

¿Cómo preparar un gratinado de patatas y queso?

gratinado_de_patata_y_cebolla_con_queso_manchego
Cocina Fácil / RBA / XABIER MENDIOLA
Gratinado de patatas y queso
Para 4 personas
Ingredientes
  • 4 patatas medianas
  • 200 g de queso rallado
  • 200 ml de nata líquida
  • Sal y pimienta al gusto
  • Un poco de mantequilla para engrasar
Paso a paso
  1. Precalienta el horno

    Es importante asegurarse de que el horno esté bien caliente antes de empezar a cocinar, para que las patatas se cocinen de manera uniforme desde el principio y el queso se derrita perfectamente.

  2. Pela y corta las patatas

    Pela las patatas y córtalas en rodajas finas, de aproximadamente 2-3 mm de grosor. Esto garantizará que se cocinen de manera uniforme y tengan la textura ideal al final.

  3. Engrasa el recipiente

    Unta ligeramente el fondo y los lados del recipiente con mantequilla. Esto evitará que las patatas se peguen durante la cocción y les dará un sabor extra delicioso.

  4. Crea las capas

    Comienza colocando una capa de patatas en el fondo del recipiente. Añade una pizca de sal, pimienta y una capa de queso rallado. Repite este proceso hasta que uses todas las patatas, asegurándote de que cada capa esté bien condimentada.

  5. Añade la nata

    Una vez que hayas creado todas las capas, vierte la nata líquida sobre ellas. Asegúrate de cubrir bien todas las patatas para que se cocinen y se impregnen bien de sabor.

  6. Hornea

    Coloca el recipiente en el horno precalentado y hornea durante 30-40 minutos, o hasta que las patatas estén tiernas y el queso se haya dorado por encima. Si las patatas aún no están blandas, déjalas unos minutos más en el horno.

Si todavía no lo tienes, búscalo en Ikea. ¡No te arrepentirás!