Un aperitivo sin bravas es como una tortilla sin huevos, es decir, incompleto. Las bravas son un tesoro de la gastronomía española que se disfrutan en cualquier momento, ya sea a media mañana, a mediodía, por la tarde o por la noche. Hoy, compartimos la receta para que puedas preparar unas patatas bravas tan espectaculares como las de cualquier bar , sin la necesidad de moverte de casa ¡Prepárate para sorprender a tus invitados con esta tapa clásica e irresistible ! ¿Dónde se inventaron las patatas bravas? ¿Alguna vez te has preguntado a quién se le ocurrió inventar las patatas bravas? ¿Dónde nació la pieza clave de cada aperitivo español? La verdad es que no se conoce con precisión el origen de las patatas bravas ni la receta original. Pero sí su primera aparición. Lo que podemos contarte con mayor seguridad es que aparecieron sobre los años cincuenta en Madrid. Y que la receta que conocemos por auténtica lleva pimentón dulce , pimentón picante, harina y aceite de oliva (y a veces caldo). Hoy te contamos cómo preparar la versión más popular de la famosa salsa brava . Que se hace como la original, pero añadiendo tomate frito . También te proponemos combinarla con alioli , un toque muy popular en la zona del Levante español, ¡que las convierte en irresistibles! Patatas Bravas Para 4 personas Ingredientes 300 gramos de patatas 2 guindillas 2 cucharadas de pimentón dulce 150 gramos de tomate frito 1 cucharada de pimentón picante 1 cucharada de vinagre de jerez 3 ramitas de cebollino Aceite de oliva Sal Paso a paso Prepara las patatas Lava, pela y corta las patatas en cubos de 2 centímetros de grosor. Cuando las tengas listas, póchalas en aceite a temperatura baja. Ve vigilando y removiéndolas de vez en cuando. Pasado un rato pínchalas con un cuchillo y cuando estén tiernas, las vas a retirar del fuego y las vas a dejar en un plato. Dora las patatas Sube el fuego del aceite al máximo y cuando esté bien caliente, introduce las patatas en este hasta que estén doradas por fuera. Déjalas reposar sobre papel absorvente para retirar el exceso de aceite y añádeles sal. Prepara la salsa barava Lava dos guindillas, pártelas por la mitad, retira las semillas y pícalas lo más fino que puedas. Sofríelas a fuego mínimo junto con el pimentón. Añade dos cucharadas de vinagre de jerez y la salsa de tomate. Cocina la salsa hasta que se caliente. Sirve Sirve en un plato las patatas y sobre estas la salsa brava. Opcionalmente añade un poco de alioli y decora con cebollino. Si te gusta el picante como el que le hemos añadido a la salsa brava, te recomendamos unos mejillones a la marinera rellenos de salsa de tomate, cebolla y guindilla . Un aperitivo perfecto para acompañar a las bravas. Como muchas de las ideas que encontrarás en Cocina Fácil, ¿a qué esperas para descubrirlas? ¡Te están esperando en nuestra web! Descúbrelas.