Si tienes reparos con las zanahorias o no se encuentran entre tus verduras preferidas, prepárate para cambiar de opinión y hacer que otros la cambien. Con esta receta comprobarás lo ricas que pueden llegar a estar cocinadas como alimento principal de una cena o aperitivo. Solo tardarás en hacerlas lo que tarde el horno en cocinarlas, unos 30 minutos a 180º con calor arriba y abajo. Este plato que te traemos hoy es perfecto tanto para hacerlo para la cena o como aperitivo. Incluso lo puedes preparar como acompañante de una carne o un pescado. La clave está en la salsa y las especias que las acompañan, ya que dependiendo de qué quieras preparar le irá más un condimento u otro. Lo mismo con la salsa. Un consejo: emplea zanahorias tiernas que son más dulces que las grandes y tardarán menos en hacerse. También puedes emplear zanahorias baby, pero ten cuidado con el tiempo de cocción o quedarán demasiado blandas. Para saber si están bien horneadas –lo ideal es que tengan una cocción al dente–, introduce en ellas la punta de un cuchillo. Si se hace fácilmente, estarán en su punto. Si no están en su punto, aumenta un poco el tiempo de cocción. Estas zanahorias asadas son una auténtica sorpresa de gustos y texturas que harán las delicias de todos los comensales. Se trata, además, de una elaboración muy original que fundirá sabores distintos y agradables con un toque de hierbas aromáticas y frutos secos. Ni las personas con reticencias hacia esta raíz se resistirán a su fusión con la crema de queso después de su horneado. Es una forma distinta y muy sugerente de comer todas las vitaminas que las zanahorias ofrecen a nuestro organismo. Puedes hacer la salsa de yogur con el queso que más guste en casa, pero es recomendable que sea un queso con sabor fuerte y nuestra recomendación es que sea parmesano o manchego .