Trufas a la menta, bocaditos dulces y refrescantes, ¡con pocos ingredientes!

¡Estas trufas a la menta son el postre perfecto! Fáciles de hacer, deliciosas y con un toque muy fresco, ideal tras una comida

ruth puig cocina facil
Ruth Puig

Periodista especializada en gastronomía

Trufas a la menta
Cocina Fácil
4 personas
35 min

5

(2 votos)

Tipo Plato:

Postres

Precio:

€ €

Dificultad:

Baja

Los postres refrescantes, como estas trufas a la menta, son ideales después de comidas pesadas o cuando quieres tomar algo dulce pero que no empalague o llene en exceso. La menta refresca y ayuda a que la digestión sea más fácil, lo que hará que te sientas más ligero. ¡Son una opción perfecta para terminar cualquier comida!

El chocolate negro combina perfectamente con el sabor refrescante de la menta, creando un bocado delicioso. Estas trufas no solo saben riquísimas, sino que también son fáciles de hacer, porque necesitan pocos ingredientes: chocolate, mantequilla, nata para montar, azúcar, menta fresca y cacao en polvo, ¡que quizás ya tengas en casa! ¿Qué esperas para prepararlas?

Si buscas una receta para sorprender, estas trufas son la mejor opción. Su textura cremosa y el toque de cacao en el exterior crean un contraste irresistible que dejará a todos impresionados. Anímate a probarla, te dejamos el paso a paso y los ingredientes con sus cantidades a continuación para que el resultado sea perfecto. ¡No te arrepentirás!

Ingredientes paraTrufas a la menta, bocaditos dulces y refrescantes, ¡con pocos ingredientes!

  • 250 g de chocolate negro fondant
  • 100 g de mantequilla o margarina
  • 125 ml de nata para montar
  • 80 g de azúcar moreno
  • 3 ramitas de menta fresca
  • 4 cucharadas de cacao puro en polvo

1. Infusiona la menta

Coloca un cazo en el fuego y agrega la nata junto con el azúcar moreno. Calienta a fuego medio hasta que la mezcla comience a hervir, removiendo ocasionalmente para que el azúcar se disuelva por completo. Una vez que alcance el punto de ebullición, retira el cazo del fuego. Añade las ramitas de menta que habrás lavado y secado previamente. Cubre el cazo con una tapa y deja reposar durante unos 15 minutos para que la menta infunda su sabor en la nata. Pasado ese tiempo, retira las ramitas de menta y reserva la nata infusionada para el siguiente paso.

2. Funde el chocolate

Trocea el chocolate negro en trozos pequeños y colócalo en una cazuela pequeña. Añade la mantequilla (o margarina) cortada en dados pequeños para que se derrita más fácilmente. Coloca la cazuela sobre un recipiente con agua caliente (baño maría) y, sin dejar de remover, calienta hasta que tanto el chocolate como la mantequilla se fundan completamente y se integren en una mezcla cremosa y suave. Es importante remover constantemente para evitar que el chocolate se queme.

3. Prepara la crema de trufas

Una vez que el chocolate y la mantequilla estén completamente fundidos, retira la cazuela del baño maría. Vierte la nata infusionada con menta sobre la mezcla de chocolate y mantequilla. Remueve bien con una espátula o cuchara de madera hasta que todos los ingredientes estén completamente integrados, formando una crema homogénea. Pasa la mezcla a un recipiente de paredes bajas para que se enfríe más rápido. Deja que se temple a temperatura ambiente y luego cúbrelo con film transparente. Colócalo en el refrigerador durante al menos una hora, o hasta que la mezcla se endurezca lo suficiente para darle forma.

4. Forma y reboza las trufas

Una vez que la mezcla de chocolate se haya enfriado y endurecido, utiliza una cuchara para tomar pequeñas porciones de la crema. Con las manos, dale forma redondeada a cada porción, asegurándote de que sean del tamaño adecuado. Después, coloca cacao puro en un plato y pasa cada trufa por el cacao, cubriéndola completamente. Presiona ligeramente para que el cacao se adhiera bien a cada trufa.

5. Deja enfriar y sirve

Coloca las trufas en un recipiente y guárdalas en la nevera hasta el momento de servir. Es recomendable dejarlas bien frías para que el contraste entre el chocolate negro y el frescor de la menta se aprecie al máximo.

Consejos para un resultado perfecto

  • Para un sabor más intenso, puedes añadir unas gotas de extracto de menta a la nata infusionada antes de mezclarla con el chocolate.
  • Si deseas un acabado más decorativo, combina el cacao puro con virutas de chocolate o azúcar glas para el rebozado.
  • Conserva las trufas en un recipiente hermético en el refrigerador para mantener su frescura y sabor.

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