Si estás buscando una receta como entrante para una comida festiva, que sea sencilla de preparar, que quede bien vistosa y además sea de lo más saludable, toma nota de esta receta de tartar de salmón, con aguacate, mango y cebolleta.
Solo hay que elegir las frutas en su justo punto de maduración, un buen salmón fresco libre de espinas y un cuchillo afilado para cortar en daditos los ingredientes. También dejamos una parte del aguacate para cortar en láminas para decorar.
Si no has preparado nunca antes tartar, no pienses que es un proceso complicado con el pescado. Para la maceración, solo tienes que cortar a daditos de similar tamaño el salmón, bien fresco, sin piel y sin espinas, y dejarlo en una fuenta con el zumo de lima y la ralladura de su piel, cebolleta picadita, aceite de oliva y sal.
Eso sí, como lo vas a comer sin cocinar, lo aconsejable es que dejes el salmón en el congelador previamente. Informa también a tu pescadero que es para consumir en crudo, así tendrá en cuenta si no ha habido ninguna ruptura de la cadena del frío. Para no arriesgarte, congela el pescado de 3 a 5 días a -20 °C en un frigorífico de 3 o más estrellas, aunque en el salmón (y sobre todo en el salvaje) el riesgo de anisakis sea menor, es mejor no arriesgarse.
La limpieza de manos y utensilios es importante siempre, pero sobre todo cuando nos comeremos un plato en el que ha interveido pescado sin cocinar. Además de por higiene, también para que el pescado crudo no tome sabores de la tabla. Si puedes, evita las de madera.
Este tartar, además de salmón, tiene uno de nuestros ingredientes favoritos. Conocido por ser protagonista de muchos desayunos saludables, su cremosidad lo convierte en el acompañante perfecto del salmón. Hablamos del aguacato.

Este tartar queda supervistoso y rico.
Cocina Fácil / RBA / Ciro Aragonés
Hay muchas formas de preparar un buen tartar similar al de nuestra receta, como el de aguacate y langostinos, o de langostinos con mango, de salmón marinado o presentado en vaso con teja de parmesano.