Sin duda, el formato tartar bien sea de salmón o de atún (los más comunes), está de moda. Y es que queda rico, es fácil y saludable. Eso sí, como el pescado se come sin cocción, hay que congelarlo antes para prevenir. Una vez descongelado el pescado, solo hay que mezclarlo con alcaparras, aceite, zumo de limón, vodka, pimienta, sal y la pimienta rosa en grano. Se cubre con film y se deja reposar en la nevera 20 minutos para que se vaya 'cociendo' con el ácido del limón. La presentación siempre queda mejor en timbal y para decorar, láminas finas de pepino y cebollino, e incluso alguna flor comestible, como en nuestra receta.