¡Las tartas saladas siempre son un éxito! Son versátiles, admiten infinidad de rellenos, resultan perfectas para dar salida a restos de ingredientes que tenemos en la nevera, se preparan en un momento y son una auténtica delicia. ¿Te hemos convencido? Hoy te proponemos una tarta con base crujiente de pasta brisa y un relleno a base de espinacas , puerro , huevos y leche . Se añaden también unos tomates en rodajas por encima y le dan un toque riquísimo de sabor al hornearse. Para que la pata brisa no suba al hornear, además de pinchar la base como te explicamos en la receta, puedes colocar un papel de horno con unos garbanzos secos o un puñado de arroz por encima, te quedará perfecta. Consejos para tu tarta crujiente con tomate El queso gruyere puedes sustituirlo por cualquier otro queso de fundir como la mozzarella, el havarti, el emmental, el gouda o el cheddar. Una vez puesto el relleno, y antes de colocar las rodajas de tomate, espolvorea un poco de parmesano rallado o unos trocitos de queso de cabra, le dará un extra riquísimo de sabor. Unos trocitos de bacon también quedarán riquísimos en la tarta, incorpóralos al relleno o coloca por encima al hornear. Si has llegado hasta aquí, es que te gustan las tartas saladas, ¿te damos otras ideas? Prueba este pastel de berenjenas, queso y jamón , esta tarta de hojaldre con calabacín y queso o, si quieres probar el formato individual, estas tartaletas de calabacín, cebolleta y queso azul .