Si estas buscando una receta ligera, sabrosa y muy rápida de preparar te adelanto que ya la has encontrado, estos taquitos frescos son justo lo que estabas buscando. Te adelanto que no tendrás ni que encender los fogones. Esta receta vegana combina frutas, verduras y una salsa con un toque picante que da vida al conjunto y hace que cada cucharada sea una explosión tan deliciosa como sorprendente. Os aseguro que sirve para todo , desde una cena rápida con amigos hasta un primer plato arrebatador en una comida más formal, pasando, como no por un picoteo informal. Una de las cosas que más me gustan de estos taquitos es que se preparan en un cuarto de hora y al no necesitar cocción se convierten en una opción perfecta para disfrutar sin complicarse la vida en la cocina. Además, son ligeros, vistosos y llenos de sabor . Ni te imaginas la perfección que alcanza esta combinación de mango dulce, pimiento crujiente. Y ten por seguro que el toque especial que le da el jengibre hace a esta sopa subir a otro nivel. Totalmente recomendable. ¡Allá por donde va triunfa! Lo bueno de estos taquitos es que puedes adaptarlos a lo que tengas en casa . Si no encuentras mango, por ejemplo, puedes sustituirlo por piña o incluso por melocotón en almíbar, escurrido y cortado en tiras. El tamari puede reemplazarse por salsa de soja común, y si quieres darle un toque más saciante, prueba a añadir tofu a la mezcla. Para quienes disfrutan del picante, una opción interesante es añadir unas rodajas de jalapeño o unas gotas de salsa sriracha a la mezcla de verduras. Y si prefieres algo más suave, puedes omitir el chile de la salsa y optar por un aliño más sencillo a base de limón y aceite de oliva. Estos taquitos frescos no solo son una opción ligera y saludable , sino que además resultan vistosos y apetecibles. La combinación de mango dulce, jengibre picante y la frescura de las verduras es perfecta para cualquier ocasión. ¿Te animas a probarlos? Sorprenderás a tus invitados con un entrante diferente, lleno de color y sabor. ¡Manos a la obra!